Según los informes, el HMS Victorious transportaba misiles balísticos intercontinentales nucleares Trident 2 cuando estalló el incendio.
Uno de los submarinos nucleares de clase Vanguard de la Armada británica se vio obligado a abortar una «misión de alto secreto» después de sufrir daños por fuego, según un artículo del domingo publicado por The Sun.
Según las fuentes del medio, se necesitaron los esfuerzos de más de 130 tripulantes, incluidos muchos que estaban fuera de servicio, para apagar un incendio eléctrico a bordo del HMS Victorious, que transportaba misiles balísticos intercontinentales nucleares Trident 2 en el momento del incidente. .
Si bien, según los informes, el fuego se contuvo con relativa rapidez, la situación de emergencia declarada por el capitán del barco obligó al barco a salir disparado a la superficie en un lugar no revelado en el Atlántico Norte para ventilar los gases tóxicos.
Según se informa, una fuente de la Marina explicó a The Sun que «todos los miembros de la Royal Navy que navegan por mar son bomberos calificados», y que esto aseguró que los barcos y submarinos británicos pudieran responder rápidamente a tales incidentes sin afectar los resultados operativos.
Sin embargo, el daño causado por el fuego hizo que el capitán del submarino abandonara una «misión ultrasecreta» no especificada y ordenara que la embarcación regresara a la base en HMNB Clyde en Faslane, Escocia.
The Sun señaló que el barco de 30 años, que costó más de $ 3 mil millones, es una de las cuatro patrullas de disuasión nuclear sin escalas de la Royal Navy. Un portavoz de la Royal Navy le dijo al periódico que el incidente no ha afectado la disuasión continua en el mar, pero se negó a proporcionar más detalles sobre las operaciones submarinas.