Una nación fundada en el conflicto
«Estados Unidos, desde su inicio, fue un país polarizado […]. Está acostumbrado a moverse en polos, y esos polos siempre han coexistido. Siempre ha habido dos extremos. Es un estadio natural, fue diseñado por sus propios fundadores para ser un país polarizado», sostiene la académica, quien también es doctora en ciencias políticas en la Universitat Autónoma de Barcelona.
«Desde su fundación, hemos observado que la sociedad estadounidense es violenta. Sí ha habido atentados políticos, pero también muchas masacres y todo tipo de actos que han sido parte del carácter de esta nación. Desde el punto de vista político, lo podemos ver claramente en los magnicidios», dice en entrevista con Sputnik Daniel Garay Saldaña, internacionalista de la UNAM y experto en estudios México-EEUU.
«Si uno revisa la historia de Estados Unidos, cuando llegan a su fin los ciclos electorales, son épocas de muchísima violencia y mucha convulsión social [una situación que aprovecha los grupos extremistas], comenta Cruz Lera.
Las teorías de conspiración
«Estos sujetos que están dentro de movimientos como el movimiento patriota, o movimientos supremacistas blancos, aprovechan los contextos de convulsión, de muchísima visibilidad, para ejercer sus acciones de terrorismo doméstico», explica.
«En los próximos meses, esperamos que el entorno de las amenazas se vuelva más dinámico, ya que varios acontecimientos de gran repercusión podrían ser aprovechados para justificar actos de violencia contra una serie de posibles objetivos», indica la advertencia del Departamento de Estado.
Una prueba para Biden
«[Estas elecciones] son un referendo del mandato de Joe Biden y también son un termómetro de cómo está percibiendo la sociedad estadounidense a esta Administración demócrata», concluye la académica.