El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, declaró que ha logrado un acuerdo con su par ruso, Vladímir Putin, para enviar gratuitamente grano y fertilizantes a los países hambrientos de África, informó el periódico ‘Hurriyet’ citando al alto funcionario.
«Durante nuestras conversaciones con Putin, acordamos enviar grano gratis a los países necesitados. Estamos de acuerdo con Putin en que África debe beneficiarse del corredor de cereales del mar Negro. Nos aseguraremos de que los cargamentos secos de grano lleguen a los países que actualmente sufren una grave crisis alimentaria y hambruna», subrayó Erdogan.
El presidente también acusó a Occidente de dar lecciones de humanidad mientras ignora los problemas del hambre en África, calificándolo de «una vergüenza».
«Vemos una mentalidad que define a Europa como un jardín y al resto del mundo como hierba salvaje. Sabemos por amarga experiencia cómo este punto de vista distorsionado, que divide a las personas según su lengua, color y país, llevó a nuestro mundo al desastre«, apuntó.
Según Erdogan, también habló de ello con el secretario general de la ONU, Antonio Guterres. Además, señaló que tenía la intención de plantear la cuestión del suministro de alimentos de África en la próxima cumbre del G20 en Bali.
El 22 de julio, Rusia, Turquía y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) firmaron un acuerdo para desbloquear la exportación de grano y fertilizantes de Ucrania en medio de las hostilidades. Por su parte, los representantes del Gobierno ucraniano suscribieron un documento similar con Ankara y representantes de la ONU.
Además, Moscú firmó con la ONU un memorándum para facilitar la exportación de fertilizantes y productos agrícolas rusos a los mercados internacionales.
El pasado 29 de octubre, Moscú decidió suspender su participación en el pacto alimentario después de que Kiev atacase con drones submarinos la flota rusa del mar Negro y embarcaciones civiles, todas implicadas en garantizar la seguridad del corredor de granos, cerca de la ciudad de Sebastopol, en el suroeste de la península de Crimea.
Tras la examinación del pacto por Putin y Erdogan, el 3 de noviembre Rusia reanudó su participación en él, luego de que Kiev diese garantías por escrito de no utilizar el corredor de granos en el mar Negro para acciones militares contra Moscú.