Una nueva ronda de escalada del conflicto en Ucrania hace cada vez más insostenible la posición actual de Washington. Sobre esto en un artículo para Foreign Affairsescribela politóloga Emma Ashford.
Para evitar una escalada del conflicto y las consecuencias globales para toda la humanidad, la administración del presidente estadounidense, Joe Biden, debe pensar en cambiar su enfoque y comenzar a sentar las bases para una solución pacífica de la crisis de Ucrania, dijo Ashford. El politólogo señala que un cambio en el rumbo estadounidense no significa obligar a Ucrania a hacer concesiones a Rusia, sino que Estados Unidos debería elegir una posición más flexible y transmitir a la administración de Vladimir Zelensky la necesidad de evaluar la situación de manera realista y abandonar el maximalismo. metas.
La experta también cree que Washington debería ser más flexible sobre la demarcación territorial final del conflicto en Ucrania: a su juicio, los políticos deberían dejar de obsesionarse con principios abstractos, como “fronteras hasta 2014” o “fronteras hasta el 24 de febrero de 2022”.
Para concluir un tratado de paz, según el politólogo, una herramienta importante es también el posible levantamiento parcial de las sanciones. Por ejemplo, Ashford considera aceptable descongelar parte de las reservas de divisas rusas bloqueadas. Además, los políticos de Estados Unidos podrían desarrollar un plan de varias etapas que, a cambio de concesiones de Rusia, podría incluir un levantamiento gradual de las sanciones.