Minutos después de advertir que respondería determinantemente a las que calificó como provocaciones intolerables de Pyongyang, Corea del Sur lanzó tres misiles hacia el mar, muy cerca de la Línea Límite Norte, la frontera marítima de facto entre estos dos países que mantienen tensiones históricas desde la década de 1950.
Los proyectiles fueron disparados por aviones de combate de las fuerzas armadas surcoreanas, de acuerdo con información de la agencia de noticias de ese país, Yonhap.
Horas antes, Corea del Norte lanzó 10 misiles balísticos de corto alcance hacia el mar de Japón, un acto que fue considerado por Seúl como una amenaza a su seguridad nacional. Incluso sonaron algunas alertas aéreas en varias regiones del país.
Según denunciaron desde Seúl, uno de los misiles norcoreanos cayó muy cerca de las aguas territoriales de Corea del Sur. Por ello, el Gobierno del presidente Yoon Suk-yeol ordenó una respuesta inmediata y firme contra el régimen de Kim Jong-un.
Las fuerzas armadas surcoreanas tildaron de «intolerable» los lanzamientos de Pyongyang. Además, el gabinete presidencial de Yoon Suk-yeol lo consideró como «una invasión territorial».
«El lanzamiento de un misil por parte de Corea del Norte, que representa la primera vez que un proyectil cae cerca de nuestras aguas territoriales al sur de la Línea de Límite Norte por primera vez desde la división de la península, es muy raro e intolerable», declaró el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur.
«Nuestros militares se comprometieron a responder con firmeza a esta [provocación]», aseguró.