El exlíder de las Autodefensas Unidas de Colombia, el colombo-italiano Salvatore Mancuso, quien cumple condena en una cárcel estadounidense en la actualidad, envió una misiva al presidente de Colombia, para responder el llamado a sumarse al proyecto de ‘paz total’.
El exlíder paramilitar y narcotraficante colombo italiano Salvatore Mancuso, referente de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), preso en una cárcel de Atlanta, Estados Unidos, en la actualidad, bajo cargos de narcotráfico por los que fue extraditado en 2008, redactó una carta pública dirigida al presidente Gustavo Petro con una propuesta para sumarse al proceso de paz en Colombia.
El exjefe paramilitar es acusado como ideólogo y perpetrador de las masacres de Mapiripán, El Aro, La Gabarra y El Salado en Colombia, al mando del Bloque Catatumbo, responsable de la muerte de 5.000 civiles en la década de 1990, según la justicia colombiana.
Desde EEUU, Mancuso respondió el planteamiento del presidente colombiano de sumarse a los esfuerzos por alcanzar la ‘paz total’ en Colombia, por parte de todos los actores involucrados.
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«Quiero decirle públicamente que mi convicción y compromiso por trabajar desde la institucionalidad para lograr una paz definitiva para Colombia siguen estando intactos», sostuvo Mancuso en la carta, publicada por el presidente en su cuenta de Twitter.
«¿Que Mancuso quiere ser gestor de paz? Hablemos», afirmó el mandatario colombiano durante la ceremonia de entrega de 591 hectáreas de tierras —ocupadas por el exjefe paramilitar de las AUC, Carlos Castaño—, a 50 familias campesinas víctimas del paramilitarismo, el pasado 29 de octubre en Montería, Córdoba, informaron medios locales.
Entrego la finca que ocupó Carlos Castaño cerca de Monteria a 50 familias campesinas.
Aqui comienza la reforma agraria. pic.twitter.com/uQ7CSGhudX
— Gustavo Petro (@petrogustavo) October 29, 2022
«Yo no tengo ningún temor a que él hable, yo no sé quién tendrá temor a que él hable, pero debe haber verdad», afirmó Petro.
Dos días después de que el presidente Petro diera el visto bueno a la posibilidad de entablar comunicación con el exlíder paramilitar, Mancuso hizo llegar la carta en la que aseguró su disposición para sumarse al proyecto de ‘paz total’ para Colombia.
«Cuente conmigo, y estoy convencido que con los excomandantes de las AUC, para ayudarle a la titánica tarea de construir la paz total. Dígame señor presidente cuál es el paso a seguir, estoy listo a entablar una conversación con usted, con el Alto Comisionado para la Paz o con quien usted considere, para materializar esta voluntad compartida de entregarle a las nuevas generaciones una Colombia pacificada y más humana», aseguró Mancuso.
Mancuso sostuvo que así como las estructuras del paramilitarismo tuvieron la «capacidad y formas» de emprender una guerra «tan frenética y desgarradora», también podrían sumar voluntades «para ayudar a pararla».
El exlíder, encarcelado en Atlanta desde 2008, afirmó que se debe terminar el proceso de reincorporación y reintegración de quienes se desmovilizaron, tras la negociación de Ralito, el acuerdo suscrito el 15 de julio de 2003, durante la administración del expresidente Álvaro Uribe (2002-2010), por el Gobierno Nacional de Colombia, representado por Luis Carlos Restrepo, alto comisionado para la paz y las AUC.
En dicho acuerdo, el gobierno y las AUC acordaron «dar inicio a una etapa de negociación», teniendo «como propósito de este proceso el logro de la paz nacional, a través del fortalecimiento de la gobernabilidad democrática y el restablecimiento del monopolio de la fuerza en manos del estado».
En su carta, Mancuso propone «darle un cierre digno a ese proceso”, que es “una de las tareas pendientes del Estado y condición sine qua non para una paz integral y definitiva», y se queja de las «retaliaciones, venganzas y persecuciones» que supuestamente padecieron las AUC después de acogerse al mecanismo de desmovilización pactado.
Mancuso elogió el «talante» de la administración de Petro «para resolver el problema de la distribución de la tierra en Colombia», a partir de su proyecto de reforma agraria y la reparación de las víctimas por parte del Gobierno, pero agregó que está pendiente «desmontar los nuevos órdenes sociales» que crearon los actores del conflicto, «bajo la mirada cómplice de los gobiernos anteriores».
«Este hecho demuestra que el Estado no fue competente a la hora de recibir y entregar las tierras y otros bienes y activos que estuvieron en manos de las autodefensas», expuso.
«Por el bien del país, todos debemos dar un paso al frente para resolver el problema de la tierra, garantizar los derechos del sector agrario en su conjunto y dignificar la vida de nuestra población campesina y rural», destacó Mancuso.