Moscú y Washington intercambiaron notificaciones en septiembre sobre la cantidad de armas ofensivas estratégicas en virtud del Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (Nuevo START), dijo el viernes el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia.
«La información sobre las cantidades totales de armas estratégicas ofensivas de Rusia y Estados Unidos se proporciona sobre la base de las notificaciones previstas por el nuevo tratado START, que las partes intercambiaron en septiembre de 2022 de conformidad con el párrafo 2 de la Sección II del Capítulo Cuatro del Protocolo al Tratado», dijo el ministerio en un comunicado.
También dio el número total de armas ofensivas estratégicas de Rusia y Estados Unidos al 1 de septiembre.
El número de armas estratégicas ofensivas reclamadas por Estados Unidos no tiene en cuenta 41 bombarderos pesados B-52H, así como otras armas que deben ser tenidas en cuenta de acuerdo con el acuerdo, apuntó.
“El número de armas estratégicas ofensivas declaradas por Estados Unidos no tiene en cuenta los 41 bombarderos pesados B-52H, que fueron declarados convertidos por la parte estadounidense, y las ojivas nucleares contadas detrás de ellos, así como 56 lanzadores de SLBM ( misiles balísticos lanzados desde submarinos) Trident-II, que son declarados convertidos por la parte estadounidense”, dijo el ministerio.
Además, tampoco se tienen en cuenta cuatro lanzadores de silos ICBM (misiles balísticos intercontinentales), que Estados Unidos ha rebautizado como «silos de entrenamiento».
La parte rusa no puede confirmar que estas armas ofensivas estratégicas se hayan vuelto inadecuadas para el uso de armas nucleares por parte de bombarderos pesados y SLBM, como se establece en el párrafo 3 de la Sección I del Capítulo Tres del Protocolo del Tratado, y también se opone a la reclasificación arbitraria de silos de misiles balísticos intercontinentales destinados a entrenamiento, en la categoría de ‘silos de entrenamiento’ prevista por el acuerdo para excluirlos del cómputo», dijo.
Firmado en 2010, el Nuevo START es un tratado de reducción de armas nucleares entre Rusia y EE. UU., cuyo objetivo es reducir a la mitad el número de lanzadores de misiles nucleares estratégicos. Estaba previsto que expirara el año pasado, sin embargo, las dos partes lograron encontrar un terreno común y aprobaron una prórroga del acuerdo por cinco años más sin renegociar ninguno de sus términos.