Rusia reforzó el control de seguridad en todas las instalaciones de infraestructuras críticas tras el atentado terrorista al puente de Kerch, en Crimea, anunció hoy el presidente ruso, Vladímir Putin, en la capital kazaja.
Tras la detonación en ese viaducto, que cruza el estrecho de Kerch para enlazar la península de Crimea con la parte continental de Rusia, “se encomendó a los servicios competentes reforzar el control para garantizar la seguridad de importantes objetivos dentro del país”, declaró Putin este viernes.
El mandatario conversó con los periodistas que dieron cobertura a las cumbres de la Comunidad de Estados Independientes y de Rusia-Asia Central, que tuvieron como sede a la ciudad de Astaná.
Putin precisó que sobre todo se custodiarán las instalaciones energéticas y los viales, considerados objetivos estratégicos.
Asimismo, añadió que Rusia es un extenso país, así que espereban que el trabajo en esta dirección sea efectivo, como hasta el momento.
Un camión explotó, el 8 de octubre último, en el puente de Kerch, y provocó el incendio de las cisternas en un tren de mercancías cercano.
Tres personas murieron, y dos tramos de la sección de carretera del viaducto que se dirige hacia la península de Crimea se derrumbaron.
El Gobierno ruso creó una comisión encabezada por el viceprimer ministro, Marat Jusnullin, en relación con el incidente.
En este momento ya se restableció el tráfico ferroviario en el puente y también se reanudó parcialmente el de vehículos de pasajeros.