Miles de manifestantes salieron el domingo a las calles de la ciudad costera de Lubmin, en el noreste de Alemania, instando a las autoridades a poner en servicio el proyecto del oleoducto Nord Stream 2, que estaba detenido y que fue diseñado para transportar combustible de Rusia a Alemania.
Alemania había estancado el lanzamiento del ambicioso proyecto energético durante meses antes de dejarlo en un segundo plano a raíz de la operación militar de Rusia en Ucrania, que ahora se encuentra en su octavo mes.
El gasoducto tocó tierra en la ciudad portuaria alemana de Lubmin, en el estado de Mecklemburgo-Pomerania Occidental.
Con el frío invierno acercándose, los manifestantes exigieron a los funcionarios de Lubmin que abrieran los grifos del enlace de gas natural Nord Steam 2 con Rusia.
“Para que nuestra patria tenga un futuro, abran finalmente Nord Stream 2”, corearon los manifestantes en la manifestación de protesta, según informaron los medios alemanes.
En noticias relacionadas, el canciller alemán Olaf Scholz firmó el domingo un nuevo acuerdo energético con los Emiratos Árabes Unidos (EAU) para compensar los importantes cortes en el suministro ruso.
Scholz dijo a los periodistas en la capital emiratí, Abu Dabi, que el gobierno alemán estaba decidido a evitar la dependencia energética de Rusia, y para lograrlo Berlín había elaborado planes para «toda una serie de proyectos aquí en términos de producción y compra de diésel y gas.»
«El hecho de que dependemos de un proveedor y también de sus decisiones ciertamente no nos volverá a suceder», dijo.
Mientras tanto, Der Spiegel informó que el país europeo enfrenta actualmente condiciones terribles que no se han visto en décadas.
Los alemanes enfrentan una prosperidad decreciente, una clase media cada vez más reducida y una desigualdad creciente, según el informe de la revista.
Las recientes crisis económicas del país se han visto exacerbadas por la inflación vertiginosa, el aumento vertiginoso de los precios de la energía y una economía lenta que empeoró después de que Rusia comenzara su operación militar en Ucrania el 24 de febrero.
“Las pérdidas en la prosperidad serán permanentes. Alemania, según las previsiones, está en declive”, dijo en el informe el economista con sede en Berlín Michael Fratzscher.
Fratzscher advirtió que la economía alemana entrará en recesión este invierno con un aumento de diez veces en el precio de la electricidad de intercambio, numerosas quiebras corporativas y una economía dañada permanentemente.