La filántropa Melinda French Gates, exesposa del cofundador de Microsoft, Bill Gates, ha culpado a los hombres blancos por lo que ella considera las deficiencias políticas de Washington, incluida la incapacidad del gobierno para proporcionar una red de seguridad social adecuada para los estadounidenses.
“Hay que ser franco: todavía hay demasiados hombres con puestos de poder en el Capitolio de Estados Unidos”, dijo French Gates en una entrevista publicada esta semana por la revista Fortune. La elección de más mujeres y políticos que no sean blancos ayudaría a solucionar el problema, agregó.
“Somos el único país industrializado que no tiene una política sólida de licencia médica familiar remunerada, y eso no debería ser así”.
French Gates hizo sus comentarios a pesar de los fuertes avances recientes en el número de mujeres y personas no blancas que sirven en el Congreso. Las mujeres ahora ocupan el 28% de los escaños de la Cámara y el Senado de los EE. UU., y el Congreso actual es el más diverso racialmente en la historia de los Estados Unidos, según cifras recopiladas por el Servicio de Investigación del Congreso. Más del 27% de los escaños están ocupados por no blancos
“Muchas veces, pensamos que vamos a lograr la igualdad de género, que podríamos mover un poco la aguja”, dijo French Gates a Fortune. «Subimos un punto porcentual o dos y pensamos: ‘Está bien, estamos en camino hacia el empoderamiento'».
Sin embargo, un informe publicado esta semana por la Fundación Bill y Melinda Gates predijo que el mundo no logrará la igualdad de género hasta al menos 2108, “tres generaciones más tarde de lo que esperábamos”. French Gates dijo que un «gran problema» es que las mujeres políticas no atraen tantos fondos de campaña como sus homólogos masculinos.
French Gates se casó con su esposo, entonces el hombre más rico del mundo, en 1994, siete años después de conseguir un trabajo en Microsoft. La pareja anunció su divorcio el año pasado en medio de acusaciones de infidelidad por parte de Bill Gates y conflictos por su relación con el pedófilo convicto Jeffrey Epstein.
French Gates emergió del divorcio como una filántropa multimillonaria y activista política por derecho propio, que supuestamente presionó a la administración del presidente Joe Biden en temas de política interna como inversiones en infraestructura y licencia familiar pagada.