La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, declaró hoy el estado de emergencia por catástrofe tras la propagación del virus que causa la poliomielitis a través de las aguas residuales en ese territorio estadounidense.
Las autoridades sanitarias redoblaron los esfuerzos para buscar indicios del virus en aguas residuales después del diagnóstico en julio de un caso de polio en el condado de Rockland, el primero detectado en Estados Unidos en casi una década.
El último hallazgo ocurrió en una muestra de esas aguas recogida el mes pasado en el condado de Nassau, en Long Island.
“En lo que respecta a la polio, simplemente no podemos correr el riesgo”, advirtió la doctora Mary T. Bassett, comisionada de Salud del estado.
La declaración de emergencia permitirá ampliar la administración de vacunas y exigir a los proveedores que envíen los datos de inmunización al Departamento de Salud para actualizar las estadísticas sobre las comunidades que más necesitan acceder a esos fármacos.
Los controles sanitarios encontraron en las aguas residuales del estado poliovirus en muestras de heces recogidas también en los condados de Orange y Sullivan, así como en la ciudad de Nueva York.
La emergencia decretada por Hochul tendrá vigencia hasta el 9 de octubre.