El gobierno del presidente Gustavo Petro, el primero de las fuerzas de izquierda y progresistas de Colombia, cumplió hoy un mes con pasos marcados hacia los cambios que prometió para el país.
Uno de sus primeros compromisos fue la paridad en su gabinete ministerial, así como en otras áreas y en ese sentido nueve mujeres y nueve hombres encabezan los 18 ministerios que acompañan al Jefe de Estado en su propósito de cambio.
Petro trabaja para alcanzar nuevas fórmulas políticas, económicas y ambientales para generar justicia, igualdad, prosperidad y dignidad de vida.
De acuerdo con una nota de su equipo de prensa, las condiciones que impuso a su equipo fueron: no tolerar ningún asomo de corrupción en sus gestiones, tener presentes a las poblaciones y las regiones excluidas de Colombia, empoderar a la juventud y descentralizar el poder Ejecutivo.
Uno de los ejes fundamentales de su gobierno, transversal a todas sus políticas, es la paz y desde antes de su investidura presidencial ya trabajaba en esa dirección.
En ese sentido, uno de los primeros pasos fue enviar una comisión a Cuba, encabezada por el canciller, Alvaro Leyva, e integrada por el alto comisionado para la paz, Danilo Rueda, y el senador Iván Cepeda con el fin de explorar las posibilidades del reinicio el proceso de paz con el Ejército de Liberación Nacional.
«Después de cuatro años de silencio, de desconfianza, de interrupción de los diálogos, en 48 horas hicimos lo que no hizo el gobierno en ese tiempo: y es poner de nuevo en marcha el proceso», recalcó hoy el senador Cepeda a Prensa Latina.
Confirmó que el 29 de septiembre celebrarán la Cumbre por el alto al fuego multilateral, una cita auspiciada por el congreso y con la participación de la iglesia católica, iniciativas humanitarias como la promovida por el expresidente Ernesto Samper (1994-1998) y la participación de las comunidades territoriales.
Ya están en trámite varios proyectos de ley con los cuales el gobierno busca transformaciones a favor del pueblo, entre ellos la propuesta de reforma tributaria, con el objetivo de recaudar los recursos en forma gradual, para financiar los programas sociales del Gobierno.
En cuanto al Ministerio de Agricultura, tiene entre sus tareas esenciales producir de nuevo alimentos para combatir el hambre y lograr la soberanía alimentaria, además, poner en marcha la reforma agraria, un punto clave del Acuerdo de Paz, pero sin la figura de la expropiación.
Los planes están bien definidos para cada cartera del gobierno, todos en función de lograr el cambio en este país que sufre desde hace más de 60 años un conflicto interno, recrudecido ante la casi nula implementación del Acuerdo de Paz.
De acuerdo con la más reciente encuesta del Centro Nacional de Consultoría, el 69 por ciento de los colombianos tiene una imagen favorable del presidente Petro.