Los diplomáticos del Reino Unido han estado viajando a las capitales europeas con el propósito de convencer a los líderes europeos de que no corten la ayuda a Ucrania, informó The Telegraph citando fuentes.
Londres teme que el apoyo europeo a Kiev pueda agotarse en medio de los precios altísimos, dijo.
Los líderes europeos parecen cada vez más preocupados por el gasto en armas y suministros humanitarios, ya que los ciudadanos se enfrentan a los altos precios de la energía, dijo una fuente.
Según el periódico, altos funcionarios de la UE temen que pueda haber un punto de inflexión en el otoño o principios del invierno, lo que cambiará la posición de la población con respecto a la asistencia a Ucrania.
Tras el inicio de la operación militar especial de Rusia para desnazificar y desmilitarizar Ucrania, Occidente ha intensificado la presión de las sanciones contra Rusia, lo que ha provocado un aumento de los precios de la energía y los alimentos en Europa y Estados Unidos.