MOSCÚ — Las autoridades estonias liberaron a dos periodistas del diario ruso Izvestia detenidos la noche del 12 de agosto por una razón desconocida, pero anularon sus visados y les prohibieron entrar en el territorio de la Unión Europea por tres años.
En su canal de Telegram el medio comunicó que «a la corresponsal Ksenia Soldátova y al camarógrafo Dmitri Timoféyev los liberaron de la comisaría de la ciudad estonia de Johvi» y los dos se dirigieron a la frontera para volver a Rusia.
«A los periodistas de Izvestia detenidos en Estonia les anularon los visados, (…) también les prohibieron entrar en los países de la UE por tres años», dice el periódico.
Según el diario, los reporteros «preparaban unos materiales sobre el veto a la emisión de visas a los rusos y sobre el tanque T-34, privado de su estatus de monumento».
La víspera el ministro de Exteriores estonio, Urmas Reinsalu, declaró que Estonia decidió cerrar las fronteras para los ciudadanos de Rusia con visados Schengen emitidos por la república.
Esta semana, la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, llamó a los países del Acuerdo de Schengen a prohibir la emisión de visados de turista para los rusos, destacando que «visitar Europa es un privilegio, no un derecho humano».
El pasado 5 de agosto el presidente de Estonia, Alan Karis, propuso retirar un monumento con un tanque real de la época soviética que se encuentra en la localidad de Narva, a orillas del río del mismo nombre, por donde pasa la frontera con Rusia.