Alto diplomático explica un enfoque diferente cuando el aliado de EE. UU. tiene la culpa de la ofensiva
El jefe de política exterior de la UE, Josep Borrel, admitió que el doble rasero impregna las relaciones internacionales, luego de que se le preguntara en una entrevista por qué Bruselas estaba mucho más dispuesta a apoyar al pueblo de Ucrania que al pueblo de Gaza. El conflicto de Oriente Medio no está en manos de la UE, dijo, señalando con el dedo a Estados Unidos.
“A menudo se nos critica por el doble rasero. Pero la política internacional se trata en gran medida de aplicar un doble rasero. No usamos el mismo criterio para todos los problemas”, dijo al diario El País, citado el jueves.
Anteriormente en la entrevista, Borrell había dicho que apoyar a Kiev contra Moscú era un “imperativo moral” para las naciones occidentales.
“Resolver la situación con esas personas atrapadas en una prisión al aire libre, que es Gaza, no está en manos de la UE”, dijo el diplomático. Llamó a las miserables condiciones de vida en Gaza “escandalosas” y “una vergüenza”, pero no se refirió a los orígenes de la crisis humanitaria.
Gaza está bloqueada por Israel, que afirma que es la única forma de contener la amenaza de los militantes palestinos, que tienen el poder en la zona. Hay enfrentamientos regulares entre los lados. Las últimas hostilidades, durante las cuales Israel luchó contra el grupo Jihad Islámico, ocurrieron este mes y terminaron en una tregua el lunes.
L
os críticos dicen que la represión de los palestinos, tanto en Gaza como en Cisjordania, solo genera más odio y radicalismo, perpetuando un círculo vicioso de violencia árabe-israelí.
Borrell explicó que “no hay solución al conflicto de Oriente Medio sin un compromiso muy fuerte por parte de EEUU”. Se hicieron muchos intentos en el pasado, pero por el momento parece que no hay camino a seguir, concluyó.
Estados Unidos ha demostrado un apoyo inquebrantable a Israel, incluso cuando continuó construyendo asentamientos ilegales en los territorios palestinos ocupados y tomó otras acciones que antagonizaron al pueblo palestino.
Los críticos de Washington, incluido el liderazgo de la autoridad palestina, dijeron que hace tiempo que perdió su credibilidad como mediador imparcial en el conflicto.