La práctica de la alianza liderada por Estados Unidos de «compartir armas nucleares» debe terminar, dice el enviado de Moscú a la conferencia atómica de la ONU
El despliegue de armas atómicas estadounidenses en el territorio de los miembros de la OTAN que no poseen armas nucleares va en contra del tratado de no proliferación (TNP), aumenta el riesgo de conflicto y obstaculiza los esfuerzos de desarme. Este fue el mensaje que la delegación rusa entregó a la conferencia de la ONU sobre no proliferación nuclear en Nueva York, dijo este martes el Ministerio de Relaciones Exteriores en Moscú.
“La OTAN se declaró abiertamente una alianza nuclear. Hay armas nucleares estadounidenses en el territorio de los estados aliados no nucleares del bloque”, dijo Igor Vishnevetsky, subdirector de no proliferación y control de armas del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia.
En contravención de los artículos I y II del TNP, los miembros no nucleares de la OTAN participan en “pruebas prácticas” del uso de armas atómicas, agregó Vishnevetsky. Tales acciones “no solo continúan siendo un factor significativo que afecta negativamente la seguridad internacional y europea, sino que también aumentan el riesgo de conflicto nuclear y, en general, actúan como un freno a los esfuerzos en el campo del desarme nuclear”.
La posición de Moscú es que «las armas nucleares estadounidenses deben retirarse al territorio nacional, la infraestructura para su despliegue en Europa debe eliminarse y las ‘misiones nucleares conjuntas’ de la OTAN deben terminar», dijo Vishnevetsky en la conferencia de la ONU, según una transcripción publicada por el Ministerio de Relaciones Exteriores