Presidente Maduro exige la devolución de un avión detenido en un vuelo de Argentina a Venezuela


El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, exigió la devolución del avión de transporte Boeing 747-300M detenido en Argentina.

“Ahora pretenden robarnos el avión, como nos robaron el oro en Londres, como nos robaron [refinadora de petróleo en Estados Unidos] Citgo, robarnos un avión que es de Venezuela… Declaramos nuestra protesta que el avión venezolano sea nos devolvió”, dijo Maduro en el canal VTV.

El Departamento de Justicia de EE.UU. solicitó a las autoridades argentinas la detención de un avión de transporte Boeing 747-300M que, según ellos, fue trasladado por una aerolínea iraní a contrapartes venezolanas en violación de las normas de control de exportaciones de EE.UU.

Según consta en el expediente, el avión, que pertenecía a la iraní Mahan Air, quedó bajo el control de la venezolana Emtrasur, que a su vez permitió “la reexportación de la aeronave entre Caracas, Venezuela, Teherán, Irán y Moscú, Rusia, sin el permiso del gobierno de Estados Unidos».

Según el mandatario venezolano, la aeronave detenida en Argentina “jugó un papel fundamental en la vida humanitaria de Venezuela”. Transportó medicamentos desde China, Rusia e India, así como ayuda humanitaria a los países del Caribe y África.

Un avión de carga de la empresa venezolana Emtrasur llegó a Argentina procedente de México el 6 de junio. A bordo iban 19 personas, entre venezolanos e iraníes. El 8 de junio despegó del aeropuerto de Ezeiza con rumbo a Uruguay, pero regresó porque ese país no aprobó el aterrizaje. A su regreso, la aeronave con la tripulación fue detenida.

Las autoridades argentinas, además de la aeronave, detuvieron a su tripulación, incluidos cinco iraníes. El comandante de la tripulación ha sido identificado como un exoficial del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, una estructura paramilitar que está incluida en las listas de terroristas de Estados Unidos, dijo el Departamento de Justicia de Estados Unidos. Mahan Air y la venezolana Conviasa, que controla Emtrasur, están bajo sanciones estadounidenses.

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