La policía de Kosovo anunció el domingo que hubo disparos en dirección a sus oficiales en medio de las tensiones en la parte norte de la autoproclamada república, pero que hasta el momento no hubo víctimas.
Más temprano ese día, la policía cerró los cruces administrativos de Jarinje y Brnjak, instando a los ciudadanos a utilizar otros cruces. Mientras tanto, se escucharon sirenas de ataque aéreo en la ciudad fronteriza en disputa de Kosovska Mitrovica. Actualmente, los serbios están construyendo barricadas en secciones estrechas de las carreteras, mientras que los albaneses se están reuniendo en masa en la parte sur de la ciudad, cerca de un puente hacia la parte norte, donde se está llevando a cabo una concentración de serbios.
«La policía de Kosovo informa oficialmente que se escucharon disparos en varios lugares, algunos de ellos en dirección a las unidades policiales, pero, afortunadamente, no ha habido heridos», dijo la policía en un comunicado.
Las autoridades de Kosovo anunciaron el viernes que a partir del 1 de agosto los documentos emitidos por Serbia no serán válidos y sus propietarios recibirán certificados temporales al ingresar a Kosovo. Al mismo tiempo, Kosovo comenzará la reinscripción obligatoria de vehículos con placas serbias, lo que afectará a los serbios en la parte norte de Kosovo y en varias otras ciudades. El ministro de Relaciones Exteriores de Serbia, Nikola Selakovic, describió esto como un intento de crear un «infierno» para los serbios locales.
El presidente serbio, Aleksandar Vucic, instó a los albaneses en Kosovo a «recuperar el sentido común» ya los serbios en Kosovo a evitar sucumbir a las provocaciones o hacer cualquier cosa que pueda conducir a un conflicto. El destaco, sin embargo, que si de hecho se produce un conflicto, Serbia saldra victoriosa.