La Unión Europea debe prepararse para el peor de los casos de una interrupción total del suministro de gas natural de Rusia, advirtió la presidenta de la Comisión Europea en una entrevista con la agencia de noticias alemana DPA, publicada el lunes.
Cuando se le preguntó sobre el plan de energía de emergencia presentado la semana pasada, Ursula Von Der Leyen enfatizó la importancia de hacer que el bloque fuera energéticamente independiente de Rusia, insistiendo en que era solo cuestión de tiempo antes de que Moscú decidiera cortar por completo las entregas de gas a la UE.
“El Kremlin no es un socio fiable para el suministro energético de Europa. Gazprom ha mantenido deliberadamente bajos sus niveles de almacenamiento. Mientras tanto, Rusia solo suministra gas en parte o nada en doce estados miembros”, dijo Von Der Leyen, y agregó que “Europa debe estar preparada para el peor de los casos: una interrupción total del suministro de gas, tarde o temprano”.
La jefa de la Comisión señaló que la UE aspira a ser completamente independiente del gas ruso a más tardar en 2027, y que se invertirán unos 300.000 millones de euros en el marco del plan REPowerEU, para ahorrar gas y acelerar “el cambio a las energías renovables”.
Luego instó a los miembros de la UE que no dependen en gran medida de las importaciones de gas ruso a unirse al esfuerzo de ahorro de energía. La presidenta de la Comisión Europea advirtió que incluso si estos estados apenas reciben gas de Moscú, aún podrían verse gravemente afectados en caso de que se detenga por completo las entregas de energía rusa a la UE.
“Por lo tanto, es importante que todos los estados miembros frenen la demanda, que todos ahorren más y compartan con los miembros más afectados”, afirmó Von Der Leyen, y agregó que “la solidaridad energética es un principio fundamental de nuestros tratados europeos”.
La semana pasada, la Comisión Europea presentó un plan energético de emergencia llamado la propuesta «Ahorre gas para un invierno seguro», que instruye a todos los países de la UE a reducir su consumo de gas en un 15 % para septiembre, una limitación que durará hasta el 31 de marzo. 2023. También se pide a los estados miembros que cambien a energías renovables o incluso carbón, petróleo y energía nuclear para lograr este objetivo, y que instruyan a sus ciudadanos a racionar su uso de gas.
El plan será discutido por los ministros de energía de la UE el martes. Von Der Leyen expresó su confianza en que el esquema será aceptado por los ministros, quienes “entienden su responsabilidad” de ver a Europa segura durante los próximos dos inviernos.
Sin embargo, varios estados de la UE hasta ahora se han resistido al plan, con España, Grecia y Portugal, Italia, Polonia y Hungría acusando a la Comisión Europea de no consultar a los estados miembros sobre el esquema.
Mientras tanto, el presidente ruso, Vladimir Putin, rechazó la idea de que Moscú podría cortar el suministro de gas a la UE, afirmando la semana pasada que el gigante energético ruso Gazprom estaba “listo para bombear tanto como fuera necesario”, pero que la UE había “cerrado todo por sí misma”.
Anteriormente calificó las sanciones del bloque contra Rusia como «locas e irreflexivas» y acusó a los líderes de la UE de cometer un «suicidio» económico bajo las órdenes de los Estados Unidos