Los servicios de seguridad de Ucrania están plagados de traidores y “colaboradores” de Rusia, afirmó el presidente.
El presidente ucraniano, Vladimir Zelensky, despidió a la fiscal general Irina Venediktova y al jefe de la principal agencia de seguridad del país, Ivan Bakanov, citando presuntamente una “traición” rampante en ambos servicios.
En el dramático anuncio del domingo, afirmó que un gran número de empleados del sucesor de la KGB en Kiev, el SBU —que Bakanov encabezó desde 2019— estaban trabajando con Rusia.
“Hasta el día de hoy, se han registrado unos 651 casos penales sobre actividades de alta traición y colaboración de empleados de la oficina del fiscal, órganos de investigación previa al juicio y otras agencias de aplicación de la ley”, declaró Zelensky al anunciar la decisión.
En medio del conflicto en curso con Rusia, “más de 60 empleados de las fuerzas del orden y la SBU” permanecieron en el “territorio ocupado” y ahora están trabajando contra Ucrania, afirmó Zelensky. Esa amplia “gama de delitos”, así como los contactos entre “empleados de las fuerzas del orden de Ucrania y Rusia”, están planteando “serias preguntas” a los jefes de los respectivos organismos, continuó, advirtiendo que “todas esas preguntas serán obtener una respuesta adecuada.”
Bakanov, quien asumió el cargo de jefe de espionaje poco después de la victoria presidencial de Zelensky en 2019, fue destituido en virtud del artículo 47 del Estatuto Disciplinario del ejército ucraniano. El artículo se refiere específicamente a una falta grave en los deberes oficiales “que causó la pérdida de vidas u otras consecuencias graves o creó una amenaza de tales consecuencias”.
Si bien aún no se ha nombrado al sucesor de Bakanov, Venediktova, que se había desempeñado como fiscal general desde marzo de 2020, fue reemplazada por Oleksiy Symonenko.