El ejército chino “ahuyentó” a un destructor estadounidense que supuestamente navegaba cerca de las islas Paracel (Xisha) en el Mar Meridional de China, dijo el miércoles el Comando del Teatro del Sur del Ejército Popular de Liberación (EPL).
Beijing afirma que el destructor de misiles guiados USS Benfold “entró ilegalmente en aguas territoriales chinas”. En respuesta, «el Comando de Teatro Sur del EPL organizó fuerzas marítimas y aéreas para seguir, monitorear, advertir y alejar» el barco, según un comunicado del EPL.
«Los hechos muestran una vez más que Estados Unidos es nada menos que un ‘creador de riesgos de seguridad en el Mar de China Meridional’ y un ‘destructor de la paz y la estabilidad regionales'», agregó.
Mientras tanto, la Séptima Flota de la Marina de los EE. UU. confirmó que su destructor cruzó las islas y dijo que «reivindicó los derechos y libertades de navegación» en un movimiento consistente con el derecho internacional. Uno de sus objetivos era desafiar las «restricciones al paso inocente» impuestas por China, Taiwán y Vietnam.
“Los reclamos marítimos ilegales y extensos en el Mar Meridional de China representan una grave amenaza para la libertad de los mares, incluidas las libertades de navegación y sobrevuelo, el libre comercio y el comercio sin trabas, y la libertad de oportunidades económicas para las naciones litorales del Mar Meridional de China”, dijo. afirmó, refiriéndose a las disputas territoriales en la zona.
Esta no es la primera vez que el USS Benfold navega en el área cercana a las islas Paracel. En enero, después de haber detectado al destructor, el ejército de Beijing se apresuró y envió fuerzas para “advertir” al buque de guerra estadounidense.
La soberanía sobre las islas Paracel es reclamada por China, Vietnam y Taiwán, aunque Beijing controla de facto el archipiélago. El Mar de China Meridional ha sido durante mucho tiempo un punto de discordia entre EE. UU. y China, especialmente alrededor de Taiwán. Aunque Washington no reclama ningún territorio en la región, ha declarado su compromiso con un “Indo-Pacífico libre y abierto”.