Tras el devastador terremoto en Afganistán el miércoles, que hasta el momento se ha cobrado más de 1.000 vidas, Irán expresó sus condolencias y prometió su pleno apoyo al país vecino.
La embajada iraní en Kabul, en un tweet, ofreció sus condolencias al pueblo de Afganistán y dijo que envió dos aviones de carga con suministros de primeros auxilios al país afectado por el terremoto.
Dijo que los equipos de socorro y rescate de la Sociedad de la Media Luna Roja de Irán (IRCS), así como los escuadrones médicos y voluntarios, se han puesto en espera para ser desplegados en Afganistán.
“Los equipos de búsqueda, rescate, servicios médicos de emergencia, rescatistas, voluntarios y personal médico del IRCS están completamente preparados para ser enviados a Afganistán si el gobierno lo solicita”, dijo la embajada.
El miércoles temprano, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Saeed Khatibzadeh, emitió un comunicado expresando sus condolencias a las familias de las víctimas y orando por la recuperación total de los heridos.
También anunció la plena disposición de Irán para ayudar a los sobrevivientes con los esfuerzos de socorro y rescate.
Ali Bahadori-Jahromi, el portavoz del gobierno iraní, también emitió un comunicado diciendo que Irán apoyaría al pueblo de Afganistán en este momento de angustia y proporcionaría la ayuda necesaria.
El terremoto más mortífero desde 2002
El número de muertos ya ha superado los 1.000, con al menos otros 1.500 heridos. Según los funcionarios, es probable que aumente el número de víctimas a medida que continúa la operación de búsqueda.
El terremoto de magnitud 6,1 se produjo a unos 44 km (27 millas) de la ciudad de Khost, cerca de la frontera con Pakistán, la madrugada del miércoles.
El Servicio Geológico de los Estados Unidos dijo más tarde que la magnitud fue de 5,9, que golpeó la región en la frontera del país con Pakistán, arrasó casas y dejó a la gente atrapada bajo los escombros.
El gobierno interino de Kabul ha pedido a la comunidad internacional ya las organizaciones benéficas mundiales que ayuden a los afectados por el enorme terremoto.
El portavoz talibán, Zabiullah Mujahid, dijo que el gobierno había convocado una reunión de gabinete de emergencia para discutir una respuesta al terremoto masivo.
“Además de ayudar a las personas afectadas por el terremoto, se encargó a todas las organizaciones pertinentes que enviaran equipos de rescate”, dijo.
El viceministro de Estado talibán para la gestión de desastres naturales, Mawlavi Sharfuddin Muslim, dijo que se espera que aumente el número de muertos ya que el terremoto también ha golpeado áreas remotas lejanas.
Este es el terremoto más mortífero que ha azotado al país sin salida al mar ubicado en el regazo de las montañas Hindukush desde 2002, cuando un terremoto de magnitud 6,1 mató a unas 1.000 personas en el norte de Afganistán.
Antes de eso, en 1998, un terremoto de magnitud 6,1 y los siguientes temblores en el noreste de Afganistán provocaron la muerte de al menos 4.500 personas.
Vecinos expresan dolor y condolencias
Muchos países vecinos de Afganistán ofrecieron sus condolencias por la catastrófica calamidad.
El presidente de Pakistán, Arif Alvi, dijo que su país se solidariza con el pueblo de Afganistán en este momento de necesidad.
“Me entristece la pérdida de vidas preciosas por un terremoto en Afganistán y expreso mis condolencias a los afectados”, escribió Alvi en un tuit.
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo en un tuit que el organismo mundial de la salud “continuará apoyando a las personas necesitadas en todo el país”.
“Mis pensamientos y oraciones están con las personas en #Afganistán que se han visto afectadas por el terremoto de esta mañana, especialmente aquellas que perdieron a sus seres queridos”.
Afganistán ha estado luchando contra un empeoramiento de la crisis humanitaria desde la salida fallida de las fuerzas aliadas lideradas por Estados Unidos en agosto pasado, seguida de la congelación de los activos nacionales de Afganistán por valor de más de 9 mil millones de dólares.
El terremoto amenaza con agravar aún más la miseria de las personas en el país del sur de Asia afectado por la crisis.