LUGANSK — Entre 300 y 400 militares ucranianos están bloqueados en la planta Azot en la ciudad de Severodonetsk, declaró el embajador de la República Popular de Lugansk (RPL) en Rusia, Rodión Miróshnik.
«Alrededor de 300 a 400 combatientes ucranianos ahora están bloqueados en la planta Azot», publicó en su canal de Telegram.
Agregó que unos 500 civiles también pueden permanecer en la fábrica. Sin embargo, Miróshnik no descartó que esta cifra pueda aumentar dado que podría haber más civiles en el territorio de Azot.
Los combatientes, añadió, exigen organizar un corredor humanitario hacia la ciudad de Lisichansk y permitirles abandonar la planta junto con los civiles, las demandas que, según el embajador, son inaceptables.
El embajador señaló que las negociaciones con los combatientes continúan e indicó que «se les garantizará la vida y un trato adecuado conforme a los requisitos internacionales si liberan a los civiles y deponen las armas».
El pasado 24 de febrero Rusia lanzó una operación militar especial en Ucrania alegando que las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, necesitaban ayuda frente al genocidio por parte de Kiev.
Según el Ministerio de Defensa ruso, los ataques militares no están dirigidos contra instalaciones civiles, sino que buscan inutilizar la infraestructura bélica.