Ursula von der Leyen ha señalado con el dedo a Moscú, a pesar de que Bruselas está recortando voluntariamente las importaciones de energía
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, acusó el martes a Rusia de “chantajear” a la UE con sus exportaciones de petróleo y gas. Sin embargo, el bloque está en proceso de desconectarse voluntariamente de estos recursos energéticos, y Moscú ha culpado a las sanciones occidentales por la escasez mundial de alimentos.
Hablando en la reunión anual del Foro Económico Mundial en Davos, Suiza, von der Leyen dijo que la UE «aceleraría» su transición a la energía verde «debido a que Rusia nos chantajea con combustibles fósiles».
Sin embargo, horas antes de que ella hablara, el ministro de Economía alemán, Robert Habeck, anunció que los 27 estados miembros de la UE «alcanzarían un gran avance en unos días» para prohibir las importaciones de petróleo ruso, del que dependen muchos estados de la UE. Alemania, por ejemplo, depende de Rusia para obtener alrededor de una cuarta parte de su petróleo importado, mientras que el bloque en su conjunto obtiene el 27% de su petróleo de Rusia.
Von der Leyen también prometió reducir la dependencia de la UE del gas ruso en un 66 % este año y eliminarlo por completo para 2027, como parte de un plan de energía verde anunciado la semana pasada. En la actualidad, el 40% del gas de la UE proviene de Rusia.
Desde el inicio de su operación militar en Ucrania en febrero, ya lo largo de oleadas de sanciones sucesivas de la UE y EE. UU., Rusia ha seguido vendiendo su petróleo y gas a la UE. Moscú ha exigido, sin embargo, que los importadores compren su gas en rublos. Más de la mitad de los clientes extranjeros de Gazprom ya han abierto cuentas en rublos con el gigante energético ruso, según el viceprimer ministro Alexander Novak.
Von der Leyen también acusó a Rusia de utilizar “las exportaciones de alimentos como una forma de chantaje”, al supuestamente bloquear los envíos de granos fuera de Ucrania y negarse a exportar su propio suministro.
Sin embargo, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo el lunes que las sanciones económicas de Occidente son responsables del aumento de los precios mundiales de los alimentos y que Ucrania es libre de exportar su cosecha a través de Polonia. Peskov también acusó a las fuerzas navales ucranianas de minar el Mar Negro, haciendo que los envíos fueran “prácticamente imposibles”.