El líder norcoreano debe ser «sincero» y «serio» para que se lleven a cabo las conversaciones, dice el presidente de Estados Unidos
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, no ha descartado una reunión cara a cara con Kim Jong-un, pero insiste en que el líder norcoreano tendría que mostrar la actitud correcta para que suceda.
Se le preguntó a Biden sobre la posibilidad de una cumbre de este tipo en Seúl el sábado durante su visita a Corea del Sur, que abrió su primera gira asiática desde que asumió el cargo.
Una reunión con Kim “dependería de si es sincero y si habla en serio”, dijo el presidente estadounidense.
Biden también emitió una declaración conjunta con el recién elegido presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, confirmando que Washington y Seúl acordaron “ampliar el alcance y la escala de los ejercicios y entrenamientos militares combinados en la península de Corea y sus alrededores”.
Los simulacros, que Corea del Norte considera muy provocativos, se redujeron en gran medida bajo el predecesor de Biden, Donald Trump, en un intento por mejorar las relaciones con Pyongyang.
Una cumbre histórica entre Trump y Kim en Singapur en el verano de 2018 fue inesperadamente buena, lo que generó esperanzas para la desnuclearización de la península de Corea. Pero dos reuniones más no lograron un gran avance, ya que Pyongyang no pudo asegurar el alivio de las sanciones que deseaba.
En cambio, las dos partes volvieron al habitual intercambio de amenazas y Corea del Norte reanudó sus pruebas nucleares y de misiles balísticos.
Algunos funcionarios estadounidenses advirtieron que Kim podría responder a la decisión de Biden de visitar Corea del Sur probando un misil balístico intercontinental o realizando una prueba nuclear.
Seúl y Pyongyang no firmaron ningún tratado de paz tras el conflicto entre 1950 y 1953.
En la declaración conjunta, Biden también reafirmó el “compromiso de disuasión extendida de Washington con la República de Corea [República de Corea] utilizando la gama completa de capacidades de defensa de EE. UU., incluidas las capacidades de defensa nuclear, convencional y de misiles”.
A pesar de sus diferencias con Pyongyang, Estados Unidos ha “ofrecido vacunas” a Corea del Norte en medio de un brote masivo de covid-19 en el país sancionado, dijo Biden. Sin embargo, agregó que Washington “no obtuvo respuesta” a la propuesta.
La próxima parada de la gira de Biden es Japón, otro aliado de Estados Unidos en la región, donde llegará el domingo para conversar con el primer ministro Fumio Kishida y el emperador japonés Naruhito.