Según los informes, Beijing les ha dicho a las élites del Partido Comunista que se deshagan de las posesiones en el extranjero y eviten la vulnerabilidad a sanciones similares a las de Rusia.
El Partido Comunista Chino (PCCh), que busca aislar a los altos mandos del país de las sanciones occidentales como las impuestas a Rusia por el conflicto de Ucrania, supuestamente emitió una directiva que disuade a los altos funcionarios de comprar activos en el extranjero.
La nueva política bloqueará los ascensos para las élites del PCCh que tienen participaciones significativas en el extranjero, informó el jueves el Wall Street Journal, citando a personas no identificadas familiarizadas con el asunto. La restricción se aplicará no solo a los bienes de propiedad directa e indirecta de los propios altos funcionarios del partido, sino también a los de sus esposas e hijos.
Se dice que el Departamento de Organización Central del PCCh emitió la nueva restricción de inversión en un aviso interno en marzo, semanas después de que Rusia lanzara su ofensiva militar contra Ucrania. Los líderes de los partidos a nivel ministerial ya no podrán poseer activos extranjeros como bienes raíces y acciones, según el informe.
A los funcionarios del partido también se les prohibirá abrir cuentas no esenciales en instituciones financieras extranjeras. Por ejemplo, el hijo en edad universitaria de un líder podría tener una cuenta en un banco local mientras asiste a una universidad extranjera, pero no se le permitiría estacionar efectivo en Singapur o Suiza como refugio seguro.
El presidente chino, Xi Jinping, ha criticado previamente la corrupción y las exhibiciones ostentosas de riqueza por parte de los funcionarios del PCCh. Un informe de 2014 que citaba registros filtrados alegaba que parientes cercanos de las élites del partido, incluido el hijo del ex primer ministro Wen Jiabao y un cuñado de Xi, supuestamente habían establecido corporaciones en el extranjero para ocultar activos.
Estados Unidos y sus aliados han impuesto severas sanciones para castigar y aislar a Rusia por la ofensiva de Ucrania. Algunas de las medidas se han dirigido a individuos, incluidos funcionarios del Kremlin y empresarios adinerados.
El presidente Joe Biden ha buscado formas de vender los activos confiscados a los rusos, como yates y bienes raíces, para que el dinero pueda usarse para ayudar a financiar la reconstrucción de Ucrania. Un proyecto de ley aprobado el mes pasado en la Cámara de Representantes de EE. UU. exige la liquidación de dichos activos para recaudar fondos para la ayuda y la reconstrucción de Ucrania. Mientras tanto, la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, dijo el miércoles que no sería legal que Estados Unidos incautara activos congelados del banco central ruso para ayudar a reconstruir Ucrania.