MOSCÚ — Los países europeos se enfrentarán a una serie de dificultades intentando reemplazar el gas y el petróleo rusos, dado que este proceso es técnicamente difícil, declaró Alexandr Shirov, experto de la Academia de Ciencias de Rusia.
«Europa es físicamente incapaz de rechazar nuestro petróleo, y mucho menos nuestro gas. Algunos países del continente dependen al cien por cien de estos suministros. Sin mencionar que renunciar al petróleo y al gas rusos es extremadamente difícil desde un punto de vista técnico», dijo Shirov
En este contexto señaló que para reemplazar el gas ruso por el gas natural licuado, los países necesitarán no solo nuevos canales de entrega, sino también instalaciones especiales de regasificación.
La intención de Occidente de renunciar a los productos energéticos rusos requiere inversiones y tiempo, agregó.
En cuanto a las sancionas contra Rusia, señaló que los países occidentales también sufren su efecto.