Estados Unidos se ha visto afectado por una escasez masiva de fórmula para bebés, que fue causada en particular por los cuellos de botella inducidos por la pandemia de coronavirus y el retiro en febrero de una fórmula para bebés fabricada por Abbott Nutrition, uno de los principales fabricantes del producto en Estados Unidos.
Murray Kessler, director ejecutivo de Perrigo Company, el fabricante estadounidense de fórmulas para bebés de marca propia para Walmart y Amazon, advirtió sobre la inminente escasez del producto en el país durante el resto de 2022.
, En una entrevista con Reuters, Kessler dijo que aunque las instalaciones de fabricación de la compañía en Ohio y Vermont ahora funcionan al 115% de su capacidad en medio de la crisis nacional, la escasez y la mayor demanda de fórmula para bebés podrían durar el «resto del año».
“Hemos dado un paso al frente y nos estamos matando para hacer todo lo posible”, señaló el CEO de Perrigo.
Agregó que a instancias de la Administración de Drogas y Alimentos de los EE. UU. (FDA), Kessler dijo que Perrigo ahora solo fabrica cuatro artículos: las versiones de marca de la tienda de Similac Pro Sensitive y Pro Advance, así como Enfamil Gentlease e Infant.
Los comentarios siguieron al comisionado de la FDA, Robert Califf, quien afirmó que los esfuerzos del gobierno para ayudar a otras compañías a aumentar la producción y aumentar las importaciones desde el extranjero deberían ayudar a aliviar la escasez de fórmula para bebés.
“Creemos que estos y otros esfuerzos en curso ayudarán a mejorar drásticamente el suministro en los EE. UU. en cuestión de semanas. Nuestros datos indican que las tasas de existencias en las tiendas minoristas se están estabilizando, pero continuamos trabajando las 24 horas para aumentar aún más la disponibilidad”, dijo Califf.
Esto se produjo después de que el presidente Joe Biden enfureciera a los críticos al argumentar el viernes que nadie podría haber predicho la crisis, que vio a padres enojados en una gran variedad de estados ir de tienda en tienda en un intento de encontrar la fórmula que se necesitaba con urgencia.
Cuando se le preguntó si su administración debería haber actuado antes para abordar la escasez, POTUS dijo: «Si hubiéramos sido mejores para leer la mente, supongo que podríamos haberlo hecho».
Sin embargo, la declaración fue precedida por Brian Deese, director del Consejo Económico Nacional, quien le dijo a CNN que la Casa Blanca había estado instando a los estados a tomar medidas para combatir el problema en febrero. Según él, la medida fue precedida por la escasez exacerbada por el retiro del mercado el 17 de febrero de algunos productos de fórmula para bebés producidos por Abbott Laboratories y el cierre de una de sus plantas.
“De hecho, les dimos a los estados la guía sobre el uso de la flexibilidad el día después de que ocurriera este retiro en febrero”, dijo Deese.
Habló mientras Biden está bajo el fuego de los republicanos, quienes señalan que el presidente de Estados Unidos dio luz verde a la entrega de armas a Ucrania por valor de miles de millones de dólares en medio de la crisis de producción de fórmula para bebés.
La Ley Federal de Alimentos, Medicamentos y Cosméticos de los EE. UU. (FFDCA, por sus siglas en inglés) se refiere a la fórmula para bebés como “un alimento que pretende ser o se representa para un uso dietético especial únicamente como alimento para bebés debido a que simula la leche humana o su idoneidad como sustituto total o parcial de la leche humana”.