Con el aumento de la inflación, grupos sociales y movimientos de izquierda se movilizaron en varios puntos del país.
Argentina registró una inflación del 6.0 por ciento en abril respecto al mes anterior y alcanzó un acumulado del 58 por ciento en los 12 meses previos, la cifra más alta desde enero de 1992, informó este jueves el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).
De acuerdo con la entidad, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) marcó un descenso en comparación con lo registrado en marzo, cuando se registró una inflación del 6.7 por ciento respecto al mes precedente.
El incremento interanual de precios alcanzó en enero de 1992 un 76 por ciento, de manera que en los últimos 30 años es el más elevado. En el primer cuatrimestre, el IPC subió a un 23.1 por ciento.
Las estadísticas que reveló el Indec muestran que el rubro que sufrió un mayor aumento de precios fue el de las prendas de vestir y calzados (9.9 por ciento) junto con los restaurantes y hoteles (7.3 por ciento) y la salud (6.4 por ciento).
Entre las incidencias a destacar está que la sección de alimentos y bebidas no alcohólicas, que impacta directamente a los grupos más vulnerables del país, estuvo casi equiparado con la inflación general, pues dio una subida del 5.9 por ciento, pese a los mecanismos de control implementados por el Ejecutivo de l presidente Alberto Fernández.
Mientras la Casa Rosada (sede del poder Ejecutivo) busca contener la inflación para recuperar el poder de compra de los salarios y las jubilaciones, mes a mes se deterioran ante esta situación económica que vive Argentina hace 10 años y que se ha agravado ante el conflicto en Ucrania.
El mandatario Fernández, quien se encuentra en Francia como parte de una de gira europea, reconoció este jueves que su equipo de trabajo no está conforme ni contento con estos índices inflacionarios en el país. Sin embargo, manifestó confianza en que el programa económico de su gestión permitirá mejorar sus tres pilares, a saber: la producción, el trabajo y mejor distribución de ingresos.
El Gobierno había previsto inicialmente una inflación anual del 33 por ciento, sin embargo, tras el acuerdo de refinanciación alcanzado el pasado mes por el Ejecutivo de Fernández con el Fondo Monetario Internacional (FMI) se proyectó una inflación para el 2022 entre el 38 por ciento y el 48 por ciento.
Ante esta situación, miles de manifestantes de izquierda y movimientos sociales se manifestaron desde diversas partes del país para reclamar a los gobernantes medidas urgentes destinadas a detener la inflación. Uno de sus principales descontentos se debe al acuerdo alcanzado con el FMI.