MOSCÚ — Moscú no va a cerrar las embajadas de los países europeos en respuesta a nuevos posibles pasos inamistosos por parte de estados occidentales en medio de la operación militar rusa en Ucrania, declaró el viceministro de Exteriores ruso, Alexandr Grushko.
«Esto no está en nuestra tradición, por eso, creemos que la labor de las misiones diplomáticas es importante», dijo Grushko, respondiendo a la pregunta de si es posible cerrar las misiones diplomáticas europeas en Rusia en el contexto de nuevos pasos inamistosos por parte de los países occidentales y la ampliación de las sanciones.
Recordó que Rusia no empezó la «guerra diplomática».
Numerosos países de Occidente anunciaron en el último mes la expulsión de diplomáticos y personal de las embajadas rusas, pretextando motivos de seguridad nacional o actividades incompatibles con la Convención de Viena.
A la expulsión de empleados de las misiones diplomáticas rusas recurrieron países como Alemania, Austria, Croacia, Dinamarca, Eslovenia, España, Estados Unidos, Estonia, Francia, Grecia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Noruega, Montenegro, Portugal, Rumanía, Suecia, Japón y Macedonia del Norte.
Lituania y Letonia rebajaron el nivel de las relaciones diplomáticas con Moscú tras declarar personas no gratas a los embajadores de Rusia en estos países.
El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, decidió expulsar a 19 empleados de la misión permanente de Rusia ante la Unión Europea.