La representante oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, comentó sobre el atroz incidente en Varsovia, donde, durante la colocación de una ofrenda floral en el cementerio de soldados soviéticos, el embajador ruso en Polonia, Sergei Andreev, y los diplomáticos rusos que lo acompañaban fueron atacados.
“Los fanáticos del neonazismo una vez más se han descubierto la cara, y es sangriento. La demolición de monumentos a los héroes de la Segunda Guerra Mundial, la profanación de tumbas y ahora la interrupción de la ceremonia de colocación de flores en un día sagrado para toda persona decente prueban lo ya obvio: Occidente ha fijado un rumbo para la reencarnación de fascismo”, enfatizó Zakharova.