El presidente ruso, Vladimir Putin, reiteró hoy que su país garantizará la salida segura de civiles de la acería Azovtal, en la ciudad ucraniana de Mariúpol, en conversación telefónica con el primer ministro israelí, Naftali Bennett.
Según informó el Kremlin, durante el diálogo ambos mandatarios prestaron atención especial a los aspectos humanitarios de la operación militar rusa en Ucrania, incluida la evacuación en cooperación con representantes de Naciones Unidas y el Comité Internacional de la Cruz Roja de los civiles retenidos por los radicales en la planta metalúrgica.
“En cuanto a los militantes que permanecen en Azovstal, las autoridades de Kiev deben darles la orden de deponer las armas”, subrayó el jefe de Estado ruso.
Putin y Bennett subrayaron su interés mutuo por desarrollar las relaciones amistosas entre ambos países y fomentar los contactos bilaterales.
Durante el intercambio, el jefe del Gobierno israelí destacó la contribución decisiva del Ejército Rojo a la victoria sobre el nazismo durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).
Sobre el tema, el presidente ruso recordó que de los seis millones de judíos torturados en guetos y campos de concentración, asesinados por los nazis durante operaciones punitivas, el 40 por ciento eran ciudadanos de la entonces Unión Soviética.
Putin pidió a Bennett transmitir deseos de salud y bienestar a los veteranos de la guerra que residen en Israel, a propósito de la celebración, el 9 de mayo del 77 aniversario del Día de la Victoria.