El ministro de las Fuerzas Armadas, James Heappey, desestimó las advertencias de una guerra nuclear y autorizó a Ucrania a usar armas del Reino Unido dentro de Rusia.
Las fuerzas ucranianas pueden usar armas suministradas por el Reino Unido para atacar objetivos en suelo ruso, dijo el martes el ministro de las Fuerzas Armadas británicas, James Heappey. Moscú ha advertido a Occidente que no intensifique lo que considera una «guerra de poder» entre Rusia y la OTAN en Ucrania, después de una serie de ataques en su territorio.
“Es completamente legítimo que Ucrania apunte a las profundidades de Rusia para interrumpir la logística que, de no ser interrumpida, contribuiría directamente a la muerte y la carnicería en suelo ucraniano”, dijo Heappey a Times Radio.
“Hay muchos países alrededor del mundo que operan equipos que han importado de otros países; cuando se usan esas partes del equipo, tendemos a no culpar al país que lo fabricó, se culpa al país que lo disparó”, agregó.
Cuando se le preguntó si apoyaba tales ataques dentro de las fronteras de Rusia, Heappey respondió «por supuesto».
Funcionarios rusos han acusado a las fuerzas ucranianas de utilizar helicópteros, artillería y drones para atacar objetivos dentro de Rusia en las últimas semanas. Un depósito de petróleo en Bryansk, a 150 kilómetros de la frontera con Ucrania, también se incendió el lunes. Si bien algunos analistas en línea han sugerido que un misil ucraniano golpeó la instalación, Moscú no ha confirmado estos rumores y los funcionarios rusos están investigando el incendio.
El Reino Unido ha inundado Ucrania con miles de misiles antitanque, y el primer ministro Boris Johnson anunció recientemente un paquete de armamento pesado de £100 millones ($130 millones) para Kiev, incluidos misiles antiaéreos, drones autónomos y vehículos blindados. La ayuda militar también ha llegado a Ucrania desde los países de la UE y la OTAN, y EE. UU. ha donado armas por valor de 3.700 millones de dólares desde que comenzó la operación de Rusia en Ucrania en febrero, contando el último paquete de 300 millones de dólares anunciado el lunes.
Moscú afirma haber destruido varios almacenes y depósitos llenos de este hardware occidental y, a medida que siguen llegando más, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, condenó el lunes a Occidente por utilizar estos envíos para librar una «guerra de poder» contra Rusia. Lavrov dijo que el riesgo de un conflicto nuclear ahora era «considerable» y agregó que «no debemos subestimar» las posibilidades de una tercera guerra mundial.
Heappey, quien como Ministro de las Fuerzas Armadas es esencialmente el segundo al mando en el Ministerio de Defensa, desestimó la advertencia de Larov. Las posibilidades de una guerra nuclear, insistió, son “extremadamente pequeñas”.
Heappey también sostuvo que Ucrania, con suficientes armas extranjeras, puede ganar el conflicto en curso. Sin embargo, en medio de los recientes avances de Rusia en el este y sur de Ucrania, el primer ministro Boris Johnson admitió la semana pasada que una victoria rusa es un resultado “realista”.
Rusia atacó al estado vecino a fines de febrero, luego de que Ucrania no implementara los términos de los acuerdos de Minsk, firmados por primera vez en 2014, y el eventual reconocimiento de Moscú de las repúblicas de Donbass de Donetsk y Lugansk. Los protocolos negociados por Alemania y Francia fueron diseñados para otorgar a las regiones separatistas un estatus especial dentro del estado ucraniano.
Desde entonces, el Kremlin ha exigido que Ucrania se declare oficialmente como un país neutral que nunca se unirá al bloque militar de la OTAN liderado por Estados Unidos. Kiev insiste en que la ofensiva rusa no fue provocada en absoluto y ha negado las afirmaciones de que planeaba retomar las dos repúblicas por la fuerza.
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