La Casa Blanca quiere poderes más amplios para proteger a los estadounidenses de la ‘actividad nefasta de los UAS’
La administración del presidente Joe Biden está buscando poderes gubernamentales ampliados para poder reclutar agencias como la CIA y la NASA para proteger a los EE. UU. contra las amenazas de los drones.
El impulso es parte de una campaña de «todo el gobierno» para abordar las amenazas a la seguridad planteadas por el creciente número de sistemas de aeronaves no tripuladas (UAS) en funcionamiento, lo que implicará mayores esfuerzos de monitoreo para detectar y desactivar drones amenazantes. “La administración está trabajando para expandir dónde podemos protegernos contra la actividad nefasta de UAS, quién está autorizado para tomar medidas y cómo se puede lograr legalmente”, dijo la Casa Blanca el lunes en un comunicado.
El Congreso aprobó una legislación en 2018 que otorga al poder ejecutivo, incluidos los Departamentos de Justicia y Seguridad Nacional, poderes ampliados para desactivar o destruir drones que se consideren peligrosos. La administración de Biden ha pedido a los legisladores que vayan más allá en la eliminación de las barreras que “impiden que el gobierno y las fuerzas del orden protejan al pueblo estadounidense y nuestros intereses vitales de seguridad”.
Esos cambios incluirían permitir que entidades como la CIA y el Departamento de Estado participen en la detección y destrucción de UAS que puedan amenazar las instalaciones estadounidenses. La CIA, por ejemplo, necesita autoridad «para responder de manera efectiva a los servicios de inteligencia extranjeros hostiles que recopilan información confidencial sobre su personal, instalaciones y actividades en los EE. UU.», dijo la Casa Blanca.
Si el Congreso aprueba la propuesta, se extenderían poderes similares a la Administración de Seguridad del Transporte para proteger los aeropuertos y el Servicio de Alguaciles de EE. UU. para el transporte de reclusos. Asimismo, a la NASA se le permitiría monitorear la actividad de los drones para proteger sus instalaciones.
El FBI advirtió en 2018 que los drones podrían usarse para atacar objetivos vulnerables en los EE. UU. Más de 850.000 UAS están actualmente registrados en EE. UU., incluidos casi 320.000 drones comerciales, según datos de la Administración Federal de Aviación (FAA).
“Los actores maliciosos han utilizado cada vez más los UAS a nivel nacional para cometer delitos, realizar vigilancia ilegal y espionaje industrial, y frustrar los esfuerzos de aplicación de la ley”, dijo la Casa Blanca, y agregó que el Congreso debe promulgar un estatuto penal que establezca estándares claros para los usos legales e ilegales de drones.
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