China es muy reservada sobre su programa de armas hipersónicas, incluidas las desplegadas con las tropas de la Fuerza de Cohetes del Ejército Popular de Liberación (PLARF). Sin embargo, las imágenes y las películas filmadas por los observadores han proporcionado información valiosa sobre los sistemas, que forman parte del vasto e inigualable arsenal del PLARF.
El miércoles apareció un nuevo video en las redes sociales de un bombardero estratégico chino Xi’an H-6N que lleva un misil balístico muy grande debajo de su vientre. El avión es una versión muy modificada del Tu-16 de fabricación soviética (nombre de informe de la OTAN «Badger»), que el Ejército Popular de Liberación ha diseñado para transportar misiles balísticos y carga extragrande como drones.
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Los observadores no pudieron identificar, positivamente el arma, pero especularon que podría estar relacionado con el misil antibuque YJ-21, que se informó por separado el miércoles que fue disparado por un crucero de misiles guiados Tipo 055.
Estas armas han sido denominadas «asesinos de portaaviones» debido a su largo alcance, gran poder de ataque y capacidad para evadir las defensas de la flota estadounidense. China ha desarrollado un grupo de tales armas diseñadas para mantener a las flotas estadounidenses bien alejadas de las aguas cercanas a China continental, lo que limita severamente el potencial ofensivo de sus aviones.
Te informamos anteriormente sobre varios videos filmados por observadores a fines de 2020, que mostraban la nueva variante de bombardero H-6N que transportaba misiles masivos que los observadores consideraron como vehículos de planeo hipersónico DF-17.
Las armas ultrarrápidas reciben un impulso temprano por un motor de cohete antes de perder su motor y volar hacia sus objetivos a velocidades superiores a Mach 5, o más de 3,800 millas por hora. A tales velocidades, pocas defensas aéreas pueden esperar detectarlos, y mucho menos interceptarlos.
El Pentágono ha especulado durante mucho tiempo que China estaba modificando su misil balístico antibuque DF-21 con capacidad hipersónica, llamando al arma experimental CH-AS-X-13. Según The Diplomat, el misil tiene un alcance de 3.000 kilómetros, que cuando se suma al alcance de 6.000 kilómetros del H6-N le da un potencial de ataque similar al de los misiles balísticos intercontinentales (ICBM).
Una vez, EE. UU. intentó construir su propio misil balístico lanzado desde el aire (ALBM) como parte del programa Skybolt, pero encontró que el arma era difícil de manejar, y después de que los misiles balísticos intercontinentales entraron en escena, el Skybolt quedó obsoleto. Hoy, aparte de China, solo Rusia coloca un ALBM: su misil de crucero hipersónico Kinzhal. Estados Unidos ha intentado ponerse al día, pero aún no ha construido un arma hipersónica viable.