WASHINGTON — Las Fuerzas Armadas de Rusia no cuentan con agentes de guerra química, aseguró la embajada rusa en Estados Unidos en respuesta a las declaraciones del portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, sobre la posibilidad de que Rusia utilice armas químicas en Ucrania.
«Las Fuerzas Armadas rusas están llevando a cabo con éxito sus tareas en el territorio ucraniano. Al mismo tiempo, no tienen ni pueden tener agentes de guerra química en su poder, ya que nuestro país destruyó todos los arsenales de armas químicas ya en 2017», reza un comunicado publicado en el canal de Telegram de la Embajada.
La misión diplomática rusa también pidió a Washington que no difundiera información errónea y que acelerara el proceso de destrucción de sus armas químicas.
«Estados Unidos sigue siendo el único país parte de la Convención sobre Armas Químicas que no ha cumplido con sus obligaciones internacionales. El arsenal estadounidense de este tipo de armas supone una amenaza real para la humanidad», indica la nota.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, anunció el 24 de febrero el lanzamiento de una «operación militar especial» en Ucrania alegando que las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, necesitan ayuda frente al «genocidio» por parte de Kiev.
Uno de los objetivos fundamentales de esa operación, según Putin, es «la desmilitarización y la desnazificación» de Ucrania.
Según el Ministerio de Defensa ruso, los ataques militares no están dirigidos contra instalaciones civiles, sino que buscan inutilizar la infraestructura bélica.
Del 24 de febrero al 11 de abril, las hostilidades en Ucrania causaron la muerte de al menos 1.892 civiles y dejaron heridos a otros 2.558, pero el balance real es mucho más alto, según la ONU. La mayoría de estas víctimas civiles, entre las que hay 153 niños muertos y 246 heridos, son resultado de ataques aéreos y de artillería.
Más de 4,5 millones de ucranianos buscaron refugio en los países vecinos, a lo que se suman unos 7,1 millones de desplazados dentro de Ucrania, según la ONU.
Numerosos países condenaron la operación militar de Rusia y apoyan a Kiev con suministros de armas, donaciones, ayuda humanitaria y sanciones contra Moscú.