MOSCÚ — El Gobierno de Canadá amplió sus sanciones por la crisis en Ucrania a nueve ciudadanos de Rusia y otros tantos nacionales de Bielorrusia.
En la lista de individuos rusos sancionados que publica la página web del Ejecutivo canadiense, fueron incluidos el jefe de la Dirección General de Inteligencia (GRU), Ígor Kostiukov, y los magnates Vladímir Potanin, Leonid Mijelsón, Víctor Vekselberg, Kiril Shamálov, Vadim Moshkóvich, Alexandr Vinokúrov, Dmitri Pumpianski y Galina Pumpiánskaya.
Las nuevas incorporaciones de la lista de sanciones contra Bielorrusia son los viceministros de Defensa Andréi Burdiko, Serguéi Simonenko y Andréi Zhuk, así como los empresarios Alexandr Shakutin, Vladímir Peftíev, Anatoli Ternavski, Pável Topuzidis, Evgueni Baskin y Valentín Baiko.
El pasado 24 de febrero el presidente de Rusia, Vladímir Putin, anunció el lanzamiento de una «operación militar especial» en Ucrania alegando que las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, necesitan ayuda frente al «genocidio» por parte de Kiev.
Uno de los objetivos fundamentales de esa operación, según Putin, es «la desmilitarización y la desnazificación» de Ucrania.
Según el Ministerio de Defensa ruso, los ataques militares no están dirigidos contra instalaciones civiles, sino que buscan inutilizar la infraestructura bélica.
Numerosos países condenaron la actuación de Rusia en Ucrania y activaron varias baterías de sanciones individuales y sectoriales que buscan infligirle a la economía rusa el mayor daño posible en un intento de presionar a Moscú para que retire sus fuerzas del territorio ucraniano.