ONU — El representante permanente de Rusia ante las Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, calificó como inconcebible el rechazo de Londres –que preside en abril el Consejo de Seguridad de la ONU– a convocar una reunión especial sobre los sucesos que se habían producido en la ciudad ucraniana de Bucha, situada al noroeste de Kiev.
«Lo que pasó ayer y hoy no tiene precedentes. Es inconcebible que se nos negara una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU. Esto es algo inimaginable, es algo sin precedentes en la historia de la ONU», dijo Nebenzia en una rueda de prensa.
Afirmó que Rusia va a presentar las pruebas que demuestran que las declaraciones de Occidente sobre Bucha son falsas.
«Tenemos la intención de presentarlas ante el Consejo de Seguridad lo antes posible», señaló.
Nebenzia expresó su convicción de que las publicaciones sobre Bucha difundidas el pasado fin de semana por las autoridades ucranianas y varios medios de comunicación internacionales tienen por objetivo «desacreditar a las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia» y «ejercer presión política» sobre el país.
Más tarde, el representante permanente de Rusia mostró ante la prensa varios vídeos que, en su opinión, invalidan las imágenes y los datos publicados por Kiev.
En particular, Nebenzia mostró un vídeo con el alcalde de Bucha, Anatoli Fedoruk, en el que este se sonreía y parecía feliz.
«Es difícil pensar que se comporte así mientras hay una masacre en las calles», comento.
El pasado fin de semana, las autoridades ucranianas y los medios de comunicación internacionales difundieron numerosas imágenes en las que aparecen cadáveres de civiles, algunos maniatados, en las calles de la ciudad de Bucha, situada al noroeste de Kiev.
La localidad estuvo bajo el control de las tropas rusas, que la abandonaron el 30 de marzo pasado.
La fiscal general de Ucrania, Irina Venedíktova, comunicó el lunes que en total las autoridades hallaron 410 cuerpos de civiles asesinados en la periferia de Kiev.
El Ministerio de Defensa ruso calificó de montaje y «provocación» las imágenes publicadas, negando que los vecinos locales sufrieran abusos mientras la ciudad permanecía bajo el control de las tropas rusas.
El Kremlin rechazó en términos categóricos la implicación de militares rusos en asesinatos de civiles en Bucha e insistió en que haya un debate internacional al respecto.