El día después del discurso ante los legisladores estadounidenses, el presidente de Ucrania se dirigió al Bundestag alemán y continuó pidiendo ayuda contra el ataque ruso.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, se dirigió a las autoridades alemanas en el Bundestag el jueves por la mañana y pidió al canciller que ayudara a destruir un nuevo «muro» que Rusia estaba construyendo en Europa con su ofensiva contra Ucrania.
El discurso se produjo el día después de su discurso ante el Congreso de los Estados Unidos el miércoles por la noche.
“No es un Muro de Berlín, es un muro en Europa central entre la libertad y la esclavitud y este muro se hace más grande con cada bomba lanzada en territorio ucraniano”, dijo Zelensky a los legisladores en un discurso en video.
“Estimado señor Scholz, derribe este muro”, le pidió al canciller, Olaf Scholz, en referencia al llamamiento de 1987 del entonces presidente de los Estados Unidos, Ronald Reagan, al líder soviético Mikhail Gorbachev frente a la Puerta de Brandenburgo de Berlín.
El presidente ucraniano afirmó que sus ciudades han sido atacadas por ataques aéreos y que las sanciones a Rusia eran «demasiado pocas» para detener la ofensiva, y pidió a Alemania más apoyo militar. Reiteró su solicitud de establecer una zona de exclusión aérea sobre Ucrania, repetidamente rechazada por los líderes occidentales por temor a una escalada del conflicto con Rusia.
Volodymyr Zelensky también hizo referencia explícita al Holocausto, evocando el famoso eslogan.
“Todos los años los políticos dicen: ‘nunca más’. Ahora veo que esas palabras no valen nada. Toda una nación está siendo exterminada en Europa”, afirmó.
En su discurso, Zelensky reprochó a Alemania por anteponer su economía a la seguridad de otros países antes del ataque ruso, criticando los múltiples vínculos que las empresas alemanas tenían con Rusia, patrocinando indirectamente las próximas hostilidades. También acusó al gobierno alemán de apoyar el proyecto del gasoducto Nord Stream 2, que estaba destinado a transferir gas natural ruso a Europa, ya que Ucrania se encontraba entre los países que se oponían al proyecto e insistían en que podría ser una amenaza para la seguridad europea.
Moscú atacó a su vecino a fines de febrero, luego de un enfrentamiento de siete años por el incumplimiento de Ucrania de los términos de los acuerdos de Minsk y el eventual reconocimiento de Rusia de las repúblicas de Donbass en Donetsk y Lugansk.
Rusia ha exigido que Ucrania se declare oficialmente como un país neutral que nunca se unirá al bloque militar de la OTAN liderado por Estados Unidos. Kiev insiste en que la ofensiva rusa no fue provocada en absoluto y ha negado las afirmaciones de que planeaba retomar las dos repúblicas por la fuerza.