MOSCÚ — Las Fuerzas Armadas de Rusia destruyeron más de 2.200 objetivos militares en Ucrania desde el inicio de la operación especial, declaró el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Ígor Konashénkov.
«En total 2.203 instalaciones de la infraestructura militar de Ucrania fueron inutilizadas desde el inicio de la operación», dijo Konashénkov ante la prensa.
El portavoz precisó que fueron destruidos 76 centros de mando, 111 sistemas de misiles antiaéreos, 71 estaciones de radar, 69 aviones de combate en aeródromos y 24 más en el aire, 62 drones, así como 778 tanques y otros vehículos blindados de combate, 77 lanzacohetes múltiples, 553 vehículos militares especiales y 279 sistemas de artillería y morteros.
Las tropas rusas, según el portavoz, avanzaron 11 kilómetros el 5 de marzo y tomaron bajo control cinco localidades.
Konashénkov agregó que «un ataque lanzado con armas de alta precisión» destruyó este domingo, 6 de marzo, un aeródromo ucraniano en Starokonstantínov.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, anunció el 24 de febrero el lanzamiento de una «operación militar especial» en Ucrania alegando que las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, necesitan ayuda frente al «genocidio» por parte de Kiev.
Uno de los objetivos fundamentales de esa operación, según Putin, es «la desmilitarización y la desnazificación» de Ucrania.
Según el Ministerio de Defensa ruso, los ataques militares no están dirigidos contra instalaciones civiles, sino que buscan inutilizar la infraestructura bélica.
Numerosos países condenaron en términos enérgicos la operación militar de Rusia en Ucrania y activaron varias baterías de sanciones individuales y sectoriales.