Una opción militar contra Teherán sigue sobre la mesa, indicó el primer ministro Naftali Bennett
El primer ministro de Israel, Naftali Bennett, calificó a Irán como la “mayor amenaza para el Estado de Israel” durante una reunión de gabinete en Jerusalén el domingo. El primer ministro también habló con el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, por primera vez en meses para discutir las crecientes preocupaciones sobre Irán y un posible acuerdo nuclear que se está discutiendo en Viena.
“Cualquiera que piense que un acuerdo aumentará la estabilidad está equivocado”, dijo Bennett, según una lectura que su oficina hizo pública. Bennett discutió la “creciente agresión” de Irán y los “pasos para bloquear el programa nuclear de Irán” en su llamada con Biden, acusando a Irán de intensificar los ataques regionales en medio de las negociaciones.
“Así es como se llevan a cabo las negociaciones, al estilo de Teherán”, dijo Bennett.
El líder israelí prometió que Israel mantendrá la “libertad de acción” en la forma en que trata con Irán, ya sea que exista un acuerdo nuclear o no.
“Actualmente estamos cerrando brechas y construyendo la fuerza militar de Israel durante los próximos años e incluso décadas. Israel mantendrá la libertad de acción en cualquier caso, con o sin acuerdo”, dijo.
El presidente Biden “transmitió su apoyo inquebrantable a la seguridad y la libertad de acción de Israel, enfatizando el pleno apoyo de su administración para reponer el sistema de la Cúpula de Hierro de Israel”, según una lectura de la llamada con Bennett, publicada por la Casa Blanca.
Las tensiones entre Israel e Irán han aumentado a medida que los intentos de salvar un acuerdo nuclear de 2015 con este último han entrado en sus etapas finales, con funcionarios estadounidenses dirigiéndose a Viena una vez más para trabajar en el posible acuerdo esta semana.
Los medios israelíes han informado sobre ejercicios militares realizados por las fuerzas de Israel en las últimas semanas, practicando ataques contra los sitios nucleares de Irán.
Bennett ha dejado claro que Israel no forma parte de ningún acuerdo, ya que muchos creen que cualquier acuerdo será desfavorable para Israel. El primer ministro dijo el mes pasado que Israel “no está obligado por lo que está escrito en los acuerdos si se firman”.