La Junta de Servicios de Policía de Ottawa celebró una reunión de emergencia el sábado por la tarde, pero no logró diseñar un plan de acción claro con respecto a los camioneros y sus seguidores, que han estado protestando contra los mandatos de Covid-19 del país durante más de una semana.
“Estamos en el octavo día de esta ocupación. Nuestra ciudad está sitiada. Lo que estamos viendo es más grande que solo un problema de la ciudad de Ottawa. Esta es una insurrección a nivel nacional. Esto es una locura. Necesitamos un plan concreto para poner fin a esto”, dijo la presidenta de la junta, la concejala de la ciudad de Ottawa, Diane Deans, al comienzo de la discusión virtual de casi dos horas.
El jefe de policía de Ottawa, Peter Sloly, estuvo de acuerdo con su interpretación de la situación y dijo que la policía local “nunca tuvo la intención de lidiar con una ciudad sitiada”, y denunció la falta de recursos y autoridad legal para dispersar la protesta.
Deans le preguntó a Solly qué tipo de recursos y ayuda necesita para poner fin a la manifestación “ahora mismo”, y si quiere que la ciudad solicite asistencia del gobierno federal o incluso del ejército. Solly dijo que “no hay una respuesta rápida”, ya que la situación está en constante evolución, y reiteró que “no tenemos suficientes recursos para abordar de manera adecuada y efectiva esta situación”.
En un momento, Deans se preguntó si la ciudad tenía fundamentos legales para declarar una reunión ilegal y luego un motín, a fin de realizar arrestos masivos, en lugar de presentar “un cargo penal a la vez”.
“Hay tanta gente involucrada en un acto más amplio de… caos, que necesitamos poder controlarlo todo”, dijo.
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Clips coming out of Quebec City on social media this afternoon. Large crowd assembled in front of the National Assembly to oppose COVID-19 mandates. High spirits and chanting.
I have never seen anything like this. This is happening across Canada. pic.twitter.com/X3mvLy8MTS
— Cosmin Dzsurdzsa 🇷🇴 (@cosminDZS) February 5, 2022
Truckers convoy currently blocked by counter protesters on bicycles in Vancouver along terminal ave@CTVVancouver pic.twitter.com/j6VYQaAEwD
— Travis Prasad (@TravisPrasad) February 5, 2022
La policía de Ottawa ha anunciado previamente que desplegará todos los recursos y tácticas posibles para cerrar el Freedom Convoy. Durante una conferencia de prensa el viernes, Sloly incluso advirtió a sus compañeros oficiales que cualquiera que viera dando “comida, agua, combustible, logística o financiación” a un manifestante sería procesado con todo el rigor de la ley.
Los oficiales están recolectando identificaciones de conductores, información de registro y seguro, e información financiera donde sea posible para ayudar en futuros enjuiciamientos, advirtió Sloly. Si bien el jefe de policía elogió a la fuerza por reducir la cantidad de camiones en el centro de la ciudad de Ottawa durante la última semana, insistió en que la fuerza «no se consuela con estos éxitos operativos hasta la fecha», argumentando en cambio que su objetivo es «terminar con la manifestación». por cualquier medio necesario.
“Todo está sobre la mesa”, reiteró el jefe de policía durante la conferencia de prensa, y dijo que la escala de la protesta “no tenía precedentes”. El jefe de policía conjuró repetidamente el espectro de los disturbios del Capitolio del 6 de enero en los EE. UU., dando a entender que su fuerza era lo único que se interponía entre la protesta pacífica y el caos total.