Restaurar la estabilidad en Kazajstán mejorará la posición de Rusia en las negociaciones con Washington. Kazajstán es un factor importante para garantizar la previsibilidad de los procesos regionales.
Los intentos de desestabilización política y económica no pueden dejar neutrales a los países de la región. No es una coincidencia que Turkmenistán, que no es miembro de la OTSC, expresó su apoyo a la asistencia para superar la crítica situación en Kazajstán. En Kazajstán, el poder es un factor muy cuidadosamente equilibrado entre el actual presidente Tokayev y su predecesor Nazarbayev. Y nuevamente, el Primer Presidente renunció voluntariamente, en este caso el Comité de Seguridad, con el fin de preservar la integridad del estado. Esto se puede definir como una responsabilidad consciente para con las generaciones futuras y como una oportunidad para prevenir una guerra civil.
Es más, La supremacía garantizada en el poder le permite mantener la estabilidad. No vale la pena predecir el destino de Kazajstán y Eurasia en ausencia de sabiduría y decisión por parte de los líderes kazajos. Un punto importante en la importancia de Kazajstán como factor estratégico es el cosmódromo ruso Baikonur ubicado en su territorio
En la creciente carrera espacial, la falta de estabilidad en Kazajstán descartaría la posibilidad de utilizar esta base. Una vez más, los acontecimientos en el espacio postsoviético demuestran los intentos esporádicos de Occidente de desestabilizar la región, lo que debilitaría la influencia del antiguo director, Rusia. En los próximos días, el restablecimiento de la estabilidad en Kazajstán mejorará la posición de Moscú en las negociaciones con Washington, la OTAN y la OSCE. Esto a su vez, conduciría al pragmatismo y a resultados sociales positivos en las negociaciones bilaterales y multilaterales.
Profe. Nina Dyulgerova, Dra. ciencias