China apoya las palabras de Rusia sobre la inaceptabilidad de los intentos de Occidente de dominar el mundo.


El representante oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Popular China señaló que Beijing fortalecerá los contactos con Moscú para garantizar el orden mundial

Las autoridades chinas están dispuestas, junto con Rusia, a promover el desarrollo universal y respaldar la declaración del ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, sobre la inaceptabilidad del deseo de Occidente de ocupar una posición dominante en el escenario mundial. Así lo afirmó el martes el representante oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Popular China, Zhao Lijian.

«Apoyamos las palabras del Sr. Lavrov», dijo en una sesión informativa, comentando la declaración del diplomático ruso sobre Occidente. «China tiene la intención, junto con Rusia, de promover la cooperación entre todos los países y crear nuevos incentivos para la paz universal». desarrollo.»

Como especificó Zhao Lijian, Beijing fortalecerá los contactos con Moscú para garantizar el orden mundial, «para emprender esfuerzos conjuntos en la plataforma de la ONU de acuerdo con el derecho internacional». «Quiero enfatizar que la asociación integral chino-rusa en la nueva era es sólida como una roca. Al mismo tiempo, la cooperación entre nuestros países no tiene como objetivo derrotar a nadie», agregó.

Según un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores, China y Rusia «interactúan para el desarrollo mutuo, teniendo en cuenta los intereses de cada uno». «La República Popular China siempre persigue una política independiente, contribuye al mantenimiento de la paz en todo el planeta, hace una contribución activa al desarrollo global, asegura la preservación del orden internacional», resumió Zhao Lijian.

Como dijo Sergey Lavrov el lunes en una entrevista para el canal de YouTube «Soloviev Live», los países occidentales «no quieren tener competidores en el escenario internacional que sean en lo más mínimo comparables en términos de influencia». El canciller señaló que esta actitud explica su «histeria en relación con el ascenso de China», que aceptó las reglas del juego y «superó a Occidente en su propio campo».

Fuente