La OTAN ha dicho que está dispuesta a trabajar para mejorar las medidas de fomento de la confianza con Rusia a condición de que el Kremlin trabaje para reducir las tensiones en la frontera con Ucrania.
En una declaración emitida el jueves, el bloque liderado por Estados Unidos insistió en que cualquier diálogo «tendría que proceder sobre la base de la reciprocidad, abordar [sus] preocupaciones sobre las acciones de Rusia, basarse en los principios básicos y los documentos fundamentales de la seguridad europea, y tener lugar en consulta con ”los socios europeos de la OTAN.
Añadió que si Moscú «toma medidas concretas para reducir las tensiones, estamos preparados para trabajar en el fortalecimiento de las medidas de fomento de la confianza».
«Reiteramos nuestra invitación de larga data a Rusia para una reunión del Consejo OTAN-Rusia en un futuro próximo», se lee en el comunicado.
El aviso se produce en medio de un empeoramiento de las tensiones entre Moscú y la organización de 30 miembros. Hablando a través de un enlace de video seguro la semana pasada, el presidente ruso Vladimir Putin le dijo a su homólogo estadounidense Joe Biden que su país está «seriamente interesado» en obtener «garantías legales confiables y firmes» que descartarían la expansión de la OTAN en Europa del Este, así como el despliegue de “sistemas de armas de ataque ofensivo” en las cercanías.
La propuesta de Putin se produjo en respuesta a las «preocupaciones» de Biden sobre las tropas rusas que supuestamente amenazan a Ucrania, que durante mucho tiempo ha tenido aspiraciones de convertirse en miembro del bloque. El líder ruso, sin embargo, insistió en que era la OTAN «haciendo peligrosos intentos de conquistar» el territorio del estado y «aumentando su potencial militar en nuestras fronteras».
El servicio de inteligencia de Ucrania y varios líderes occidentales han emitido advertencias en las últimas semanas de que Moscú podría estar preparando una invasión total de su vecino. El Kremlin ha rechazado sistemáticamente las acusaciones y, en cambio, ha expresado su preocupación por la posibilidad de que la ex república soviética se una a la OTAN.
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, dijo que la expansión del bloque militar más hacia el este es una línea roja para Moscú y que la posible adhesión de Kiev es inaceptable. Según Zakharova, Estados Unidos está arrastrando a Kiev a la órbita de la organización militar y convirtiéndola en una “cabeza de puente” de confrontación con Rusia, una medida que podría desestabilizar a Europa.
El mes pasado, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, destacó que el diálogo pasado entre los dos resultó inútil y que la OTAN estaba más interesada en «impulsar la propaganda y presionar a Rusia» sobre Ucrania.
En octubre, Moscú anunció que suspendería todos los vínculos bilaterales directos con la OTAN y cerraría sus oficinas en la capital rusa. La medida se produjo como respuesta a la expulsión por parte del bloque de ocho diplomáticos rusos de su sede en Bruselas, que se cree que se debe a denuncias de participación en «espionaje» no revelado. Rusia niega los cargos.