La OTAN ha rechazado el pedido de Rusia de prohibir el despliegue de misiles de alcance intermedio con capacidad nuclear en Europa, al tiempo que culpa a Moscú de violar el tratado INF que fue descartado por Estados Unidos.
En respuesta a una sugerencia rusa de una moratoria sobre el despliegue de tales misiles en Europa el martes, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, calificó la idea de «no creíble».
«La propuesta de Rusia sobre una moratoria no es creíble porque teníamos una prohibición y ellos violaron esa prohibición», dijo Stoltenberg, refiriéndose al Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF), un histórico acuerdo de seguridad de 1987 del que Estados Unidos se retiró unilateralmente. en 2019.
Reiteró las acusaciones del bloque de que Moscú había entrado en conflicto con el tratado ahora extinto al desplegar sistemas de misiles prohibidos bajo su alcance, exigiendo que Rusia los desmantele antes de ofrecer negociar una moratoria.
Entonces, a menos que Rusia destruya de manera verificable todos sus misiles SSC-8, que son esos misiles que violaron el tratado INF, entonces no es creíble cuando ahora proponen una prohibición de algo que ya han comenzado a desplegar.
El secretario general de la OTAN se refería al misil 9M729, también conocido con el nombre de informe de la OTAN SSC-8 Destornillador. El 9M729 es un misil de crucero lanzado desde tierra, diseñado para ser utilizado con lanzadores móviles.
Washington y la OTAN han afirmado repetidamente que los misiles se crearon en violación del Tratado INF, que prohibía los misiles balísticos terrestres, los misiles de crucero y los lanzadores de misiles con un alcance de 500 a 5.500 km. Los misiles 9M729 fueron finalmente citados por la administración Trump como el pretexto para descartar el acuerdo INF.
Moscú, sin embargo, ha sostenido que las municiones se han creado en «pleno cumplimiento» del tratado y podrían volar hasta 480 km.
Rusia también ha afirmado que EE. UU. Había violado el tratado ahora desaparecido, señalando los sistemas Mk-41 Aegis Ashore, que se implementan en Europa.
Si bien Washington retrata los sistemas solo como parte de su defensa antimisiles, Rusia ha señalado repetidamente que los Mk-41 pueden usarse para lanzar misiles de crucero como Tomahawks, que actualmente son transportados exclusivamente por buques de guerra estadounidenses.
En las últimas semanas, Rusia ha pedido la creación de un acuerdo de seguridad integral, con las restricciones propuestas sobre el despliegue de misiles como parte de él. Moscú también señaló que no tiene confianza en las promesas de la OTAN sobre el no despliegue de tales misiles, insistiendo en que tales garantías deben tener una forma legalmente vinculante.
La postura fue reiterada por el viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Ryabkov, quien advirtió que, en última instancia, Moscú podría verse obligado a desplegar ese tipo de armamento en la propia Europa.