El secretario de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, Frank Kendall, ha afirmado que Estados Unidos y China estaban inmersos en una acelerada carrera armamentista hipersónica y que el ejército estadounidense no había hecho lo suficiente para desarrollar armas capaces de «asustar» a Beijing.
Kendall dijo a Reuters el martes que «hay una carrera armamentista, no necesariamente para aumentar el número, sino para aumentar la calidad» y que la carrera «se había prolongado durante bastante tiempo».
El secretario también afirmó que «los chinos lo han hecho de manera muy agresiva» y que, si bien Estados Unidos no «hizo nada», tampoco «hizo lo suficiente».
“Me encanta la A-10. El C-130 es un gran avión que ha sido muy capaz y muy efectivo para muchas misiones. Los MQ-9 han sido muy efectivos para la lucha contra el terrorismo, etc. Siguen siendo útiles, pero ninguna de estas cosas asusta a China ”, dijo Kendall, refiriéndose al avión de combate de ala recta A-10 Thunderbolt, el avión de transporte de cuatro motores Lockheed C-130 Hercules y los drones MQ-9 Reaper. Los aviones se produjeron en 1972, 1954 y 2001, respectivamente.
Los altos mandos militares estadounidenses han hecho sonar la alarma sobre la supuesta ventaja de Pekín en tecnología militar de vanguardia. Los informes en los medios estadounidenses de una prueba hipersónica supuestamente realizada por China en verano irritaron al Pentágono, y un alto general de la Fuerza Espacial estadounidense afirmó que Estados Unidos estaba muy por detrás de China y Rusia en lo que respecta a armas hipersónicas.
«No estamos tan avanzados como los chinos o los rusos en términos de programas hipersónicos», dijo el general de la Fuerza Espacial de EE. UU. David Thompson en noviembre, y agregó que Estados Unidos tiene que «ponerse al día muy rápidamente».
, Sin embargo, Beijing ha negado repetidamente los informes de que había probado un misil hipersónico, insistiendo en que el lanzamiento de julio involucró un vehículo espacial reutilizable regular.