Los talibanes han acusado durante mucho tiempo a Washington de financiar a ISIS, y ahora indirectamente tienen razón, ya que un número creciente de soldados afganos entrenados por Estados Unidos y funcionarios de inteligencia se están uniendo a las filas del grupo terrorista para luchar contra los talibanes.
Estados Unidos gastó la asombrosa cantidad de 88.000 millones de dólares en armar y entrenar a las fuerzas armadas de Afganistán, pero las fuerzas afganas se derrumbaron antes de la rápida reconquista del país por parte de los talibanes en agosto.
Aunque los talibanes han prometido amnistía a este personal, han circulado historias de represalias violentas y, según el Wall Street Journal, un número «relativamente pequeño, pero creciente» de ex soldados y espías afganos está acudiendo en masa al único grupo que actualmente se resiste al gobierno talibán. — Grupo terrorista Estado Islámico.
La rama afgana del Estado Islámico (IS, anteriormente ISIS), IS-K, está absorbiendo con entusiasmo a estos reclutas entrenados por Estados Unidos. Según los exfuncionarios de seguridad y miembros del Talibán con los que habló el Wall Street Journal, algunos ex soldados del gobierno se han unido por un cheque de pago, y otros por falta de una mejor alternativa al gobierno talibán.
«Si hubiera una resistencia, se habrían unido a la resistencia», dijo al periódico el exjefe de espías Rahmatullah Nabil, y agregó que «por el momento, ISIS es el único otro grupo armado».