Los buques de la armada rusa y china completaron su primera misión de patrulla conjunta en el Océano Pacífico, cubriendo una distancia de más de 1.700 millas náuticas (alrededor de 3.100 km) en una semana, dijo el Ministerio de Defensa de Rusia.
La misión histórica tenía como objetivo mantener la estabilidad en la región del Pacífico y salvaguardar la infraestructura marítima de las dos naciones, dijo el ministerio. Comenzó el domingo pasado y concluyó con éxito el sábado.
Durante la patrulla, los barcos rusos y chinos navegaron por el estrecho de Tsugaru entre las islas japonesas de Honshu y Hokkaido. La Armada japonesa, que monitoreó sus acciones, dijo que el paso se realizó de conformidad con el derecho internacional y que no se violaron las aguas territoriales del país.
Los marineros militares rusos y chinos también desarrollaron maniobras tácticas conjuntas y realizaron otros ejercicios de entrenamiento a lo largo de su ruta.
El grupo de patrulla estaba formado por diez buques, incluidos dos grandes buques antisubmarinos Admiral Tributs y Admiral Panteleyev del lado ruso y dos destructores chinos Kunming y Nanchang.
La patrulla siguió los simulacros conjuntos de las dos armadas en el Mar de Japón la semana pasada, que los vieron realizando simulacros de artillería, practicando defensa contra minas, entre otras cosas.
Las tensiones han ido en aumento en el Pacífico recientemente, y Estados Unidos está cada vez más preocupado por la creciente influencia de China en la región. Los estadounidenses y sus aliados de la OTAN han estado enviando buques de guerra en misiones de patrulla en el área, a pesar de que China critica esos movimientos como provocadores y socavando la estabilidad regional. Washington también ha estado respaldando activamente el impulso independentista de la isla china de Taiwán.
El mes pasado, EE. UU., Australia y el Reino Unido firmaron el llamado pacto AUKUS con el objetivo de armar Canberra con submarinos de propulsión nuclear, lo que también causó preocupación en Beijing.