La primera reunión cara a cara de los presidentes de Rusia y Turquía, Vladimir Putin y Recep Tayyip Erdogan, en un año y medio se llevará a cabo en Sochi el miércoles contra una nueva exacerbación de la situación en el norte de Siria. Erdogan espera que Moscú cambie su enfoque para resolver el problema sirio, pero también dijo que esperaba que la reunión en Sochi resultara en una decisión importante con respecto a las relaciones entre los dos países, escribe Kommersant. Sin embargo, no especificó si estaría relacionado con Siria.
Putin y Erdogan no se han reunido durante todo un año y medio debido a la pandemia. La agenda de las conversaciones también incluirá la situación en Libia, Afganistán y Transcaucasia, así como otros temas de cooperación bilateral. Sin embargo, el asunto sirio sigue siendo uno de los más difíciles para ellos, escribe el periódico. Es en Siria donde los militares turcos y rusos corren constantemente el riesgo de un enfrentamiento directo. Sin embargo, hasta ahora, políticos rusos y turcos han enfatizado que, a pesar de todos los desacuerdos, ellos sabrán como negociar, según Kommersant.
El presidente turco también viajará a Sochi esperando un nuevo compromiso con Rusia. Según Erdogan, todos los momentos difíciles con el desarrollo de los eventos en Siria están siendo resueltos por las dos partes a través de negociaciones y Ankara se está esforzando por llevar las relaciones bilaterales con Rusia a un nuevo nivel, escribe el periódico.
El investigador del Centro de Estudios Estratégicos del Medio Oriente (ORSAM) en Ankara Oytun Orhan dijo a Kommersant que el tema más importante en las conversaciones será la situación en la parte ocupada de la provincia siria de Idlib sirio. Según él, la presión rusa está creciendo en Idlib y hay cada vez más ataques aéreos: Turquía intentará reducir la escalada de la situación y Rusia pedirá algo a cambio.